Castilla-La Mancha pide una moratoria nacional en los alquileres y se adelanta con sus 6.700 viviendas

Toledo

Castilla-La Mancha va a proponer al Gobierno de España una moratoria en los alquileres. De momento lo hará con las viviendas de la Junta al tiempo que estudia cómo implementar una renta social en colaboración con el Estado. Y es que paliar las dificultades de los 15.000 afectados por ERTES en la región es uno de los objetivos.

"No vamos a permitir que los ciudadanos se queden tirados por la crisis sanitaria y económica" ha dicho el vicepresidente José Luis Martínez Guijarro. Un ejemplo, el de los afectados por los 3053 ERTES cuya solicitud ya se ha presentado. 728 en Albacete para 3283 personas; 79 en Ciudad Real para 3829; 370 en Cuenca para 1551 trabajadores; 306 en Guadalajara con 1634 afectados y 773 en Toledo con 3861. Además, hay otros 86 en la Dirección General de Trabajo que son de ámbito regional con 876 trabajadores afectados. El Gobierno regional estudia implementar la renta que fije el Gobierno de España pero eso corresponde al Consejo de Ministros, decía Guijarro.

En esta línea sería importante a juicio del ejecutivo autonómico que se apruebe una moratoria en los alquileres del país, "que los grandes tenedores de viviendas se acojan y las familias se vean aliviadas" Lo van a proponer esta tarde y, en el ámbito regional, se analizará la posibilidad de hacerlo con las 6700 viviendas propiedad de la Junta.

PLANES DE CONTINGENCIA

Albacete y Guadalajara serán las primeras provincias en las que desde esta semana se ponen a disposición de la Sanidad los recursos de nuevos espacios en los que alojar camas para pacientes de coronavirus. Concretamente, en Albacete, se habilitará la Facultad de Medicina con 200 camas más, incrementando la capacidad actual en uso del Hospital General, la Clínica Quirón y la Clínica del Perpetuo Socorro. En Guadalajara, se traslada ginecología y partos a la Clínica de La Antigua, con 21 camas, más otras 60 en la Residencia Siglo XXI.

En Ciudad Real se plantea, a futuro, ubicar 120 camas más en las salas de espera de la zona de consultas. En Cuenca, el plan de contingencia autoriza el uso de las instalaciones del Policlínico, con 50 camas. Y en Toledo podrían usarse las camas del Hospital Nacional de Parapléjicos que no tiene prácticamente usuarios