Máximo tres personas en entierros e incineraciones durante el estado de alarma

Burgos

El Ayuntamiento de Burgos ha informado de las nuevas medidas excepcionales en relación con los velatorios y ceremonias fúnebres que se han impuesto con el objetivo de limitar la propagación y el contagio por el COVID-19.

Es por eso que quedan prohibidos todos los velatorios, tanto en instalaciones públicas como privadas y se restringen otras ceremonias fúnebres, sea cual sea la causa del fallecimiento. Además, se pospondrá la celebración de cultos religiosos o ceremonias civiles fúnebres hasta la finalización del estado de alarma.

También queda restringida la participación en la comitiva para el enterramiento o despedida para cremación de la persona fallecida a un máximo de tres familiares o allegados, además de la persona que oficie los ritos funerarios, respetando siempre la distancia de uno a dos metros entre ellos. 

La orden también establece que en el caso de fallecidos por COVID-19 no se podrán realizar prácticas de tanatoestética, intervenciones de tanatopraxia ni intervenciones por motivos religiosos que impliquen procedimientos invasivos en el cadáver.

Desde el área de Sanidad del Ayuntamiento de Burgos se ha ampliado la franja horaria para las inhumaciones de cadáveres en el cementerio municipal: por la mañana de 10 a 13 horas y por la tarde de 16 a 18 horas, mientras que las inhumaciones de cenizas se realizarán a las 16 horas. En el supuesto de que nadie lo solicite con, al menos, 24 horas de antelación, esa franja se dedicará también a la inhumación de cadáveres.

La nueva orden también establece que, durante el período de vigencia del estado de alarma, los precios de los servicios funerarios no podrán ser superiores a los precios vigentes con anterioridad al 14 de marzo de 2020.