"No estamos confinados, estamos a salvo"

Motilla del Palancar

Ainara Tomás vive gran parte del año en una caravana viajando por los países nórdicos y ha aprendido a afrontar los duros inviernos en los que el aislamiento es obligatorio debido a las condiciones meteorológicas de esa zona del planeta. Afirma que es los nórdicos asimilan y aceptan que han de pasar esos meses del año confinados porque no pueden cambiar la situación y ha de haber invierno para que después haya primavera. Además, el enfoque es totalmente distinto al que hemos dado aquí las primeras semanas, donde nos hemos autoimpuesto un ritmo frenético que seguramente no podamos mantener.

Hay un cuento que afirma Ainara que se narra a los niños nórdicos en el que se plasma la idea de que aburrirse puede ser bueno para que surjan ideas nuevas y sobre todo para valorar cuando te estás divirtiendo.

Esta situación es diferente a la que se vive allí, pero hay algunas cosas que nos pueden servir para sobrellevar mejor el encierro, como disfrutar de los pequeños placeres que tenemos en casa y sobre todo, pensar que esto es una oportunidad y no un castigo: "no estamos confinados, estamos a salvo y mantenemos a salvo a nuestros seres queridos, ya disfrutaremos de la primavera cuando podamos salir con seguridad".

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