No a las clases en julio

Valencia

Pongámonos por un momento en la piel de los niños y las niñas. ¿De verdad que cuando acabe el confinamiento lo que querríamos es ponernos a estudiar en julio? ¿Encerrados en un aula sin aire acondicionado en el mes de más calor? ¿Y después de meses atrapados en nuestras casas sin poder jugar en la calle?

Sinceramente, si entendemos que uno de los colectivos que antes debe poder salir a la calle es el de la infancia, no podemos defender que haya clases en julio. Es una tortura innecesaria para los niños, y que además no ayudará a solucionar nada. Así que me parece bien que la Conselleria de Educación no quiera dar clases en verano. Otra cosa es que se abran los colegios para actividades lúdicas, para que los niños puedan, por fin, jugar libremente. Si el coronavirus lo permite, claro.

Con esto no quiero decir que no haya que ayudar a los estudiantes con más dificultades. Pero habrá que hacerlo a lo largo del curso que viene. Durante todo el curso. Con un plan de refuerzo serio, con recursos y profesorado. Y no con una medida cosmética como la de cuatro clases en julio para hacer ver que ponemos a los profesores a trabajar. Por cierto, también habrá que preparar un buen plan de educación a distancia. Por si acaso.