En el foco del contagio: "En las residencias de mayores hemos actuado tarde y mal"
En Galicia hay 223 residencias de mayores, el 80 por ciento de las plazas son de gestión privada
En el foco del contagio: "En las residencias de mayores hemos actuado tarde y mal"
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Santiago de Compostela
Con 200 muertos y más de 1.200 contagios, las residencias de mayores se han convertido en el principal foco de la pandemia en Galicia. A pesar de ver lo que ocurría en otras comunidades, aquí acabó pasando lo mismo. "Hemos reaccionado tarde y mal", asegura en la SER Miguel Ángel Vázquez, presidente del la Sociedade Galega de Xerontoloxía y Xeriatría.
Vázquez considera que la crisis del coronavirus ha puesto de manifiesto que la sociedad vive de espaldas a los mayores. Prefiere no entrar en las diferencias entre las residencias públicas y privadas, insiste en que es el coronavirus el que se ha llevado la vida de muchos mayores, considera que no se ha aislado a las personas contagiadas como se tenía que haber hecho.
¿Cómo hemos llegado hasta aquí?
19 de marzo, Residencia de las Hermanitas de Caldas. La Xunta hace público el primer positivo confirmado por coronavirus en un centro de mayores en Galicia. Habían pasado quince días desde el primer contagio conocido en nuestra comunidad, un hombre de 49 años que vino a hacer una entrevista de trabajo a Galicia, y el virus llegaba a las residencias de mayores. En realidad había llegado antes, pero ese 19 de marzo se tuvo conocimiento del primer positivo en una prueba PCR. El virus llevaba ya semanas circulando por esos centros. Esa es una de las causas de la rápida propagación del Covid-19 en las residencias, y el retraso en hacer las pruebas a los usuarios y a los trabajadores con síntomas...
Faltan equipos de protección
Sin mascarillas suficientes, sin EPI´s, los equipos de protección individual, el coronavirus, al igual que ha ocurrido en otras comunidades, acabó extendiéndose por centros residenciales de las cuatro provincias. Todos los sindicatos han denunciado la escasez de material de protección. Un mes después, las residencias gallegas registran 200 muertes, más de 1.000 casos activos de contagio, y eso teniendo en cuenta que tan sólo se le ha hecho la prueba a la mitad de los 20.000 ancianos que residen en centros de mayores.
La situación acabó desbordándose
Obligando a la Xunta a activar un protocolo de emergencia.Se pusieron en marcha dos residencias integradas, una en Santiago y otra en Baños de Molgas, para ingresar a pacientes con Covid que no podían ser atendidos en su centro. Residencias que se improvisaron de un día para otro cómo nos cuenta Catia Vázquez, una de las trabajadoras a las que se llamó de urgencia para incorporarse a la residencia de Baños de Molgas en Ourense. La Xunta tomaba esta medida ante la virulenta propagación del virus, y decidió intervenir las dos residencias con más contagios. Los casos se contaban por entonces ya por centenares, sobre todo, en centros gestionados por la empresa DomusVi.
Un sector muy privatizado
En Galicia hay 223 residencias. De ellas, la Xunta tan sólo gestiona directamente 24, las restantes están, en su mayoría, en manos de empresas privadas, fundaciones y entidades religiosas. En concreto, DomusVi y la Fundación San Rosendo gestionan la mayor parte de las plazas. Hay alguna residencia de titularidad municipal, otras gestionadas por fundaciones y entidades religiosas, pero la gran mayoría de las 20.000 plazas que existen en la actualidad, en torno a un 80 por ciento, son de gestión privada. Ante las críticas que están recibiendo por la gestión en esta crisis, desde la asociación gallega de residencias privadas señalan a la Xunta en ese reparto de culpas. La práctica totalidad de las muertes y los contagios, hasta ahora, se han producido en esas residencias privadas.
El contrapunto lo encontramos en las residencias públicas
Tan sólo hay constancia de una muerte en un geriátrico público, y una veintena de pacientes confirmados de coronavirus. Incluso hay centros limpios de Covid-19, sin ningún contagio. Es el caso del centro de atención a personas mayores de Ortigueira, que pertenece al Consorcio de Servicios Sociais creado por el bipartito presidido por Emilio Pérez Touriño. Tiene 50 residentes y 35 trabajadores. Desde que aparecieron los primeros casos en el municipio, extremaron las medidas de prevención para evitar contagios, como no explica Araceli Collado, la directora del centro, orgullosa del trabajo de todo su equipo.
Un servicio público frente a un sector privado en el que manda el mercado. Habrá que tomar nota pensando en un cambio de modelo que parece necesario una vez que pase la pandemia.