Los niños vuelven a pisar la calle en una jornada tranquila y de alegría contenida

El de ayer fue un domingo especial y a la vez extraño. Un 26 de abril en el que se conjugaron sentimientos encontrados para los más pequeños de la familia, que después de 45 días en sus casas, por fin pudieron pisar la calle. Los menores se mostraban contentos por poder romper, al menos por una hora, con el confinamiento, pero a la vez se sentían tristes por no poder jugar con sus amigos o visitar a sus abuelos. Niños y niñas de no más de 14 años se lanzaron a la calle aleccionados sobre las reglas a seguir en sus paseos, -los cuatro unos: 1 hora, 1 kilómetro, 1 adulto y 1 vez al día- y algo temerosos con lo que se podían encontrar. El día transcurrió tranquilo en la mayoría de municipios de la comarca.

Las fuerzas y cuerpos de seguridad prestaron especial atención a los puntos donde podía producirse una mayor afluencia de gente. Aunque los parques y áreas de juego permanecen aún clausuradas en la totalidad de municipios. En Calp, también las playas.

En El Poble Nou de Benitatxell los pequeños fueron recibidos como auténticos héroes. Agentes de la Policía local y voluntarios de Protección Civil, entregaron un kit a todos los niños con los que se encontraron. El kit estaba compuesto por mascarillas y un diploma de buen comportamiento.

Por cierto, el trabajo de los agentes y voluntarios de El Poble Nou, fue recompensado con pizzas del restaurante Antiquary, que las repartió gratuitamente, y pantallas faciales donadas por el Forn Moraira.