La falta de turistas devuelve a las Dunas de Maspalomas su aspecto de hace 50 años
La ausencia de transeúntes como consecuencia del confinamiento permite una recuperación de procesos ecológicos en ese hábitat más rápida de lo habitual.
Las Palmas de Gran Canaria
La ausencia de turistas transitando por las Dunas de Maspalomas, en el sur de la isla de Gran Canaria, ha devuelto las infinitas ondulaciones que las hicieron famosas y el aspecto que tenían hace 50 años.
Así lo ha informado el Cabildo en un comunicado en el que explica que el confinamiento decretado por el Estado de Alarma está facilitando la recuperación de procesos ecológicos esenciales de diversidad de entornos.
Al respecto, el director técnico del proyecto Masdunas, Miguel Ángel Peña, ha resaltado que esta recuperación no se está produciendo solamente en la floración de la cumbre de Gran Canaria y en la reproducción de las aves, sino que también ha favorecido que el trabajo para mejora de las dunas ofrezca resultados positivos a mayor velocidad de la esperada.
Asimismo, señaló que más de la mitad de la arena que se trasladó desde la punta de La Bajeta a Playa de El Inglés --un proceso que se realiza para que esa arena no caiga en el fondo del mar y se pierda, sino que tenga un segundo ciclo en el circuito dunar situándola en la casilla de salida--, ya se ha incorporado al sistema y ha empezado a conformar dunas costeras merced a los captadores de arena allí instalados.
Por su parte, el proyecto incluyó la repoblación de la zona con plantas de balancones, ya que atrapa la arena y se convierten finalmente en el germen de nuevas dunas.
"Es bien conocido que estas plantas juegan un notable papel en la estructuración de la arena en forma de dunas, pues logran que se incorporen al ecosistema", expuso Peña.
Un espléndido aspecto
Por ello, mostró su satisfacción porque tras seis semanas muestran también un "espléndido aspecto", perfectamente enraizadas y con una viabilidad superior al 50 por ciento de los ejemplares pese a las duras condiciones de suelo y pluviometría en que se desarrollan.
También comentó que los 40.000 metros cúbicos que se extrajeron de la punta de La Bajeta durante la segunda y tercera fase del movimiento de arena ya han sido repuestos por la naturaleza a través de la dinámica marina.
En cuanto a La Charca de Maspalomas, Peña afirmó que la zona mantiene la misma vida animal de siempre, si bien es más que probable que con la inminente migración de aves y la tranquilidad que ha ganado el lugar, muchas permanezcan durante más tiempo para alimentarse y descansar en su viaje desde sus cuarteles de invierno en Europa hasta África.
Finalmente, celebró que especies como el chorlitejo patinegro, a punto de desaparecer de Gran Canaria, verá facilitada su reproducción con la tranquilidad que proporciona la ausencia de transeúntes.