La mano salvadora de Rubén Blanco

Vigo

Rubén Blanco nos ha acostumbrado a grandes paradas, a manos salvadoras en las muchas finales y partidos dramáticos que ha tenido que disputar el Celta estas dos últimas temporadas. Esos dos mano a mano contra el Sevilla en Balaídos, o sus paradas en el Bernabéu o esos paradones contra el Leganés en un partido dramático de Balaídos. Pero Rubén Blanco, además de esa sangre fría en el césped denota un corazón caliente con el deporte. Es un apasionado. Y más en concreto con el balonmano femenino. Su hermana Claudia Blanco juega en el segundo equipo del Balonmano Porriño de la División de Plata. En verano, cuando las cosas se complicaban para el segundo equipo, Claudia explicó a su hermano, en una comida familiar, que igual no podían salir en la División de Honor B. Rubén Blanco le dijo que no se preocupase que él patrocinaría al equipo. Que sí saldrían. Y así fue. El segundo equipo pasó a llamarse Rubensa Balonmano Porriño y se hizo cargo del aspecto económico convirtiéndose en patrocinador principal. Rubensa es una empresa que se dedica a alquilar, comprar y vender bienes inmobiliarios.

Pues para la próxima temporada, sin hacer mucho ruido, como le gusta a Rubén Blanco, va a dar un paso más. Amplía su apoyo a todo el Conservas Orbe Balonmano Porriño y Rubensa pasará a convertirse en el principal apoyo económico de club. Un acto de generosidad y de compromiso de Rubén Blanco hijo y de Rubén Blanco padre. Ambos llevaron en todo momento los contactos y las conversaciones con Abel Estévez presidente del club para echar una mano en estos tiempos de zozobra. Con este apoyo económico, en tiempos difíciles y de crisis, Rubensa ayudará a dar estabilidad al Balonmano Porriño para seguir en la División de Honor, para seguir en la División de Plata y para apoyar a toda la estructura. Así es Rubén Blanco, no le gustan los focos, no le gusta hacer ruido, prefiere mantenerse en un segundo plano. Como nos contaba en Hoy por Hoy Vigo y Baixo Miño, Abel Estévez, le tienen que pedir que vaya a hacerse una foto, pero, sin tener una ficha mareante, ha demostrado una gran generosidad. El Conservas Orbe-Rubensa Balonmano Porriño es otra mano salvadora de un portero, frío en el campo y de corazón caliente. El deporte femenino y el balonmano gallego están en deuda con el portero de Mos. El Balonmano Porriño salva un 7 metros gracias a un gran portero: Rubén Blanco.