"Ya tenía ganas de volver a trabajar"

Ciudad

Durante estos días muchos pequeños comercios han vuelto a tener cierta actividad pero con algunas restricciones. La fase 0, la de transición entre el confinamiento y el comienzo paulatino de la desescalada, permite a muchos negocios reabrir sus puertas, eso si, con cita previa.

Han podido reabrir peluquerías, ferreterías, fisioterapeutas, locales de ropa y zapatería, menaje,... Un sin fin de tiendas de cercanía y servicios que tuvieron que cerrar con la pandemia, siempre que el local sea menor de 400 metros cuadrados. Es el caso de Dulce Bebé, especializado en el mundo de los recién nacidos, que han tenido que implementar una serie de medidas de seguridad para prestar servicio, como nos cuenta su gerente, Carlos Pérez.

En un sector tan específico como el suyo el parón ha sido difícil, ya que aunque la economía se ha detenido, no la biología y los niños han seguido naciendo. Las nuevas madres y padres han necesitado elementos para sus cuidados, así que aunque el local ha permanecido cerrado si han servido algunos productos muy concretos a domicilio.

En el local se puede encontrar todo lo relacionado con el mundo del bebé: carritos, sillas para el coche, ropa y calzado, juguetes, complementos y en breve una novedad relacionada con la situación que estamos viviendo: mascarillas para niños.

Desde el lunes gran cantidad de negocios han podido reanudar su actividad, eso si, si les sale rentable ya que se han establecido algunas restricciones como concertar una cita previa que garantice que en la tienda sólo hay un cliente, y el establecimiento de un horario especial para mayores de 65 años. Además se da la posibilidad de realizar pedidos a domicilio y también para recoger en el local. Se han establecido además protocolos de higiene y seguridad dependiendo del sector.

Cuando se pase a la siguiente fase, la 1, podrá haber varios clientes en local, pero si limita el aforo al 30`por ciento de lo que tenía establecido como máximo. Se prohíbe el uso de los servicios del local, no se podrán manipular los productos y se mantendrán las medidas de seguridad de los trabajadores.

En esta etapa también podrán reabrir los mercadillos y la hostelería, pero sólo las terrazas, que tendrá un uso máximo del 50 por ciento de las plazas totales con las que contaba.