La Región de Murcia no tiene remedio

Pierdan toda esperanza. La región de Murcia no tiene remedio. El gobierno autonómico de la región de Murcia, compuesto por el mismo partido que lleva en la presidencia 25 años y otro partido que dijo que venía a la política para cambiar las cosas, ha aprobado en plena crisis de la pandemia un decreto ley de Mitigación del Impacto Socioeconómico de la COVID 19 con una nueva normativa que permite a los ayuntamientos autorizar la instalación de empresas saltándose todos los controles medioambientales que hasta ahora había.

En la región de Murcia. Donde hemos visto morir al Mar Menor y echarle la culpa de ello al gobierno central, el gobierno regional legisla para cargárselo todo un poquito más. Han utilizado el virus para permitir una expansión urbanística aún más acelerada y caótica que la actual, lo que reducirá superficies verdes, espacios rurales y naturales. En la misma línea, en estas semanas han modificado, al dictado de los empresarios murcianos, la ley de puertos y la ley de suelo.

Que no, que no hay esperanza alguna en la regeneración de esta región. No culpo a este gobierno regional. No. El gobierno regional solo traduce la voluntad de una mayoría de murcianos, que apoyan a ese partido y sus adláteres con un inamovible 60% de voto elección tras elección desde hace 25 años. La cosa funciona así, más o menos: el votante medio de la región es más de derechas que de izquierdas; vota a su gobierno de derechas durante 25 años seguidos; ese gobierno regional legisla para cargarse el medio ambiente; esa ciudadanía sale a manifestarse por las calles, pongamos el 30 de octubre pasado, indignadísima por los peces muertos del Mar Menor; diez días después es convocada a las urnas y van y votan mayoritariamente no al partido de derechas clásico que se lo ha cargado todo, sino al de la ultraderecha, que es el menos ecologista de todos y se lo cargaría todo mucho más si estuviera en el poder. Meses después, el gobierno regional de color azul y naranja legisla contra el medio ambiente otra vez y entonces el ciudadano de la región de Murcia arremete contra el gobierno central socialista por esto y por lo otro y por lo de más allá.

Así funcionamos en esta región. No tenemos remedio. Pronto habrá otra sopa verde en el Mar Menor, y seguro, seguro que el murciano medio encontrará la fórmula para poder echarle la culpa de esto o a Pedro Sánchez o al Coletas, que ni siquiera ha venido nunca por aquí. Seguro. ¿Qué se apuestan?