Los menores refugiados saharauis no llegarán este verano a Málaga

Málaga

Cerca de sesenta niños provenientes de los campos de refugiados saharauis se quedarán este año sin vacaciones en las familias de acogida de Málaga donde pasan los meses de verano huyendo del calor del desierto

"Vacaciones en Paz" : un programa que se puso en marcha hace cuarenta años y que se repite cada verano. Desde el 15 de junio al 31 de agosto menores entre 8 y 14 años procedentes de los campos de refugiados saharauis en la ciudad argelina de Tinduf pasan dos meses en familias de acogida voluntarias.

Durante ese periodo cada asociación programa diferentes actividades para que estos menores puedan conocer el entorno y se conviva no sólo con la familia de acogida sino además con los vecinos, el pueblo de acogida y otros niños de pueblos cercanos. Encuentros deportivos, fiestas con payasos, juegos malabares y musicales, visitas a museos y exposiciones, parque acuático, son algunas de las alternativas de ocio para estos pequeños procedentes del campo de refugiados a quienes, además, se les hace un seguimiento sanitario para conocer su estado.

Isabel González es la responsable de Fandas en Málaga y vicepresidenta regional de esta federación que agrupa a las asociaciones que participan en el programa de acogida "Vacaciones en paz".

El acogimiento familiar temporal a los menores refugiados saharauis es una figura manifiestamente solidaria, puede participar cualquier persona, soltera, divorciada con o sin hijos, o grupo familiar y que no se encuentre en ningún proceso de adopción de otro menor. Este año las previsiones en Málaga apuntaban que se podría superar la cifra de menores acogidos respecto al pasado año...

El programa se sustenta gracias a la subvención de ocho mil euros que, según la asociación, concede cada año el Ayuntamiento de Málaga y a la que se suman los ingresos en las actividades benéficas que realiza la oenegé, sólo los pasajes de avión de los menores el año pasado costaron más de 23.000 euros, ahora la idea es reconducir los fondos.

Y todo para hacer más llevadera la vida a menores que llevan toda su vida confinados en campos de refugiados.

Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados en los campamentos de Tinduf residen más de 173.000 personas.