Vuelve la política

Valencia
Vuelve la política… si es que alguna vez se fue del todo. La crisis sanitaria por el coronavirus ha supuesto un antes y un después en todos los sentidos. También en el ciclo político.
El shock inicial dejó a más de un dirigente descolocado, sin saber qué hacer ni cómo reorientar su discurso y acción política. En el caso valenciano, el presidente Ximo Puig vio pronto la oportunidad que tenía ante sí para cobrar todo el protagonismo sin apenas rival. Ni sus socios en el Gobierno ni la oposición levantaron mucho la voz. Porque en una situación de anormalidad, todo lo que suene a guerra política tiende a rechazarse. Pero en una situación de normalidad, lo normal es la guerra política. Y parece que poco a poco volvemos a la “normalidad”, aunque sea con muchas comillas. Ya todo vuelve a ser política.
Si algo ha quedado claro a estas alturas es que el plan de desescalada no responde únicamente a criterios técnicos o sanitarios. Algo de político también tiene cuando hay indicadores y argumentos poco claros y transparentes. Ha sido el mejor pistoletazo para la guerra política: entre Conselleria y Ministerio de Sanidad, entre PSPV y Compromís, entre Consell y oposición… Queríamos una desescalada diferenciada y la realidad es que nos cuesta digerir las diferencias: entre los valencianos y los vascos, entre los propios valencianos… Bienvenidos a la nueva normalidad. Ahora sí.




