Preparados, listos...

Cuenta atrás en la sede la Cultural para iniciar el camino hacia la nueva normalidad. El equipo blanco espera el levantamiento de alguna de las restricciones que pesan sobre León, que seguirá en la fase inicial de la desescalada, para reabrir las puertas del Reino de León y preparar el play-off exprés, un reto de obligado cumpliento para no caer en el pozo más profundo de la Segunda División B. La cúpula del club quiere tenerlo todo listo para cuando lleguen las indicaciones oficiales oportunas, que puede ser cuestión de horas, dar vía libre para que José Manuel Aira y sus futbolistas se calcen las botas.

Este sábado regresó el movimiento a las dependencias del estadio municipal en plena puesta a punto. En los exteriores, numerosos vehículos de empleados, sanitarios y jugadores del club. Dentro, tests, reconocimientos, organización, desinfección de instalaciones...El Reino de León recupera parte de su temperatura a la espera del definitivo desembarco de aquellos jugadores que ya tienen la orden para su regreso inmediato a la ciudad.

Las primeras sesiones se realizarán de manera individual, como marca la legalidad, y a puerta cerrada, la norma en esta campaña. Se han suspendido los actos sociales y las comparecencias ante la prensa se producirán, en un principio, de manera telemática. Este ha sido el método empleado por los técnicos para mantener una rutina física de alta exigencia, alrededor de setenta sesiones domiciliarias a las órdenes de los preparadores físicos como Mario Sandúa para tratar de reducir los efectos de un parón sin precedentes, una baza que la Cultural tratará de aprovechar con respecto a otros con más limitaciones. La respuesta de los jugadores ha sido muy elogiada por técnico y capitanes del equipo.

El cuadro leonés ya ve la luz al final de un túnel por el que ha transitado sin sobresaltos públicos, siendo un ejemplo en la gestión económica de la crisis (renunció al ERTE llegando a un acuerdo con la primera plantilla para reducir sus emolumentos) y mantieniendo la mesura cuando se desataron los rumores. Nunca se dio crédito al tan comentado ascenso directo de los campeones de grupo, se defendió el play-off exprés como la solución más justa dentro de la injusticia general, ya que el deseo de técnico y dirección era disputar los once partidos restantes, y se entendió con la norma en la mano el derecho que asistía al Ibiza o el Badajoz para ser los primeros en regresar al trabajo. Por el camino quedó la defensa del proyecto de la Segunda B Pro que, en parte, aliviara a los más pudientes del "infierno" que se avecina en las próximas temporadas, aunque la nueva liga tendrá que esperar un año para su entrada en vigor.

Ha llegado la hora. La Cultural ha puesto el reloj en marcha para afrontar el ilusionante tramo final, peculiar, sin precedentes, pero con un premio al final de su recorrido que no quiere dejar escapar. La estabilidad a medio y largo plazo estará en juego cuando en pleno verano ruede la pelota en un escenario neutral, tal vez San Pedro del Pinatar, y sin público en las gradas...siempre y cuando la situación sanitaria lo permita.