La hostelería navarra comienza a "ver la luz"

Pamplona

Bares y cafeterías que han abierto sus terrazas durante la pasada fase 1 han podido trabajar respondiendo al deseo de muchos clientes. "Muy contentos por la respuesta", señala Beatriz Huarte, responsable de ANAPEH, la asociación que agrupa a pequeñas empresas de hostelería de Navarra. Esa respuesta positiva de los clientes se ha concentrado además en un número reducido de establecimientos, ya que no todos los bares y cafeterías disponen de licencias para abrir terrazas en la vía pública.

Desde este lunes, 25 de mayo, esa oferta se amplía porque ya es posible desayunar, comer o cenar en el interior de los establecimientos, siempre en mesa y nunca en barra. Además, habrá que respetar las condiciones higiénicas y sanitarias, tales como la separación de dos metros al menos entre las sillas de distintas mesas y sin rebasar el 40% del aforo establecido para cada local. Sin embargo, sobre estos reglamento, Huarte reivindica que se tenga en cuenta la particularidad de cada local, al entender que los aforos máximos están determinados por criterios de evacuación y puede ocurrir que haya locales que por su reducido tamaño, no van a poder alcanzar ese aforo nunca si respetan las distancias mínimas entre mesas y, al revés, habrá locales más grandes que, según como reorganicen su espacio, podrán mantener sus mesas a distancia suficiente sin llegar a rebasar ese 40 % de aforo máximo que ahora rige por criterios sanitarios.

La portavoz de Anapeh también pide responsabilidad a la clientela para aguardar a que sea el personal del establecimiento el que determine cómo se ocupan las mesas, una vez que hayan sido limpiadas y desinfectadas tras el paso de los anteriores usuarios. Llama a que la clientela no mueva las mesas para juntarlas, cambiando su disposición.

HOTELES EN MARCHA

También algunos hoteles van abriendo sus puertas a los viajeros una vez que va remitiendo la crisis sanitaria. El Hotel Tres Reyes ha reiniciado su actividad con la "ilusión de volver a empezar", señala su director Víctor Sánchez. Con un 15% de ocupación de clientes con necesidades de desplazamientos laborales o que han viajado a Pamplona por motivos médicos, el hotel reabre sus puertas de momento con un 20 % de la plantilla; una manera de ir adecuando el establecimiento a los nuevos ritmos con toda las garantías higiénicas y sanitarias que se pueden tomar y pensando ya en un verano en el que el turismo interior puede atraer clientes. De hecho, Sánchez refiere que para agosto "la gente no ha parado de hacer reservas", aunque es consciente de que muchas de esas reservas luego se pueden anular, pero añade "tengo expectativas de que ese mes se vaya recuperando el turismo y en septiembre, lo que afecta a Pamplona, tanto turismo interior como cliente de negocios, se vuelva a reactivar poco a poco".