Llamar a las cosas por su nombre
La opinión de Marta Cantero

Marta Cantero. / Cadena SER

Las Palmas de Gran Canaria
El Día de Canarias es una oportunidad para mirar al futuro. Observar a vista de pájaro la pequeñez de estas islas frente a la inmensidad del Atlántico y del desierto sahariano que las circundan. Y verlas, además, ante el desafío que supone este tiempo de pandemia. No es momento ni de celebraciones vacuas ni de nostalgias identitarias. Y si miramos al futuro vemos que no terminamos de llamar a las cosas por su nombre en esta tierra. Cuando es fundamental hacerlo para acertar en la salida, en la reconstrucción social y económica que tendremos que afrontar en los próximos años.
No estamos llamando a las cosas por su nombre cuando no decimos claramente que la clase política no está a la altura de las circunstancias: ni allá, en la capital, ni aquí, en el terruño. Tampoco cuando no reconocemos que el Gobierno de Canarias atraviesa una crisis encubierta, con dimisiones y ceses que en tiempos normales abriría portadas día sí y día también.
Tenemos un Ejecutivo progresista, sí, pero incapaz de lograr una mínima concreción del Gobierno estatal, ni en recursos ni en calendario. Pese a todo, este sábado se firma el Pacto por la Reconstrucción: una declaración más de intenciones, sin unanimidad y sin financiación.
Llamemos, pues, a las cosas por su nombre. La situación de emergencia no se está afrontando bien. En plena pandemia, es mayor el esfuerzo que se hace en comunicar brillantes naderías que en acertar en la resolución de los problemas reales.
Vivimos como los adolescentes en las redes, en un constante postureo.

Marta Cantero
He trabajado en diversos medios de comunicación de las Islas, tanto en Gran Canaria como en Tenerife,...




