Los socorristas de Cruz Roja, también agentes de sensibilización este verano

Valencia

Poco a poco se van poniendo en marcha los equipos de Cruz Roja en las playas de todo nuestro litoral de cara a la campaña de verano. Los y las socorristas se preparan con un nuevo Plan de Playas que incluye protocolos de protección y seguridad, además de contemplar una nueva función para todos ellos: la figura del agente de sensibilización.

Según Miguel Ángel Sánchez Arrocha, responsable de Playas de Cruz Roja, la previsión para este año es como la de los anteriores, cubrir unas 250 playas de casi veinte provincias españolas, con el despliegue de unos 2.000 socorristas, además de algunos más que se sumen sobre todo para apoyar esa labor de sensibilización. Una labor que consistirá en ofrecer información y orientación, "hay que aprovechar para explicarlo todo, incluso en qué fase estamos" y qué cosas se pueden hacer. La intención de Cruz Roja es facilitar que los mensajes de concienciación y seguridad lleguen a la población, sobre todo en zonas donde ya existen determinados protocolos, para asegurar que se respetan.

Ahora bien, aunque se puedan encargar de vigilar que se respeten las distancias o el aforo, los y las socorristas no se encargarán en ningún caso de multar a nadie, ya que ellos no son la autoridad. Eso sí, se coordinarán con las autoridades de cada zona, también con los ayuntamientos, para los que estarán a su disposición en todo momento.

El equipo de Cruz Roja compaginará esta nueva función con la del socorrista. Para ello todos han recibido formación especial en este nuevo escenario con el coronavirus presente. Ahora bien, el protocolo variará en función del escenario. No se darán las mismas medidas durante una asistencia sanitaria leve que en un rescate acuático.

Si una persona se acerca a los puestos de Cruz Roja a recibir asistencia sanitaria, el personal ya conocerá qué tipo de protección debe utilizar en cada momento, incluso procedimientos por si las personas necesitan ayuda, como proporcionarles una mascarilla. En caso de una asistencia leve, por ejemplo, bastará con usar mascarilla quirúrgica, guantes y una pantalla protectora.

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Pero, ¿y si se trata de un rescate, por ejemplo, por parada cardiorrespiratoria? Para ese caso, Cruz Roja complementará más EPI al personal, porque la exposición con otras personas es más prolongada. Por ello, sin poder garantizar la distancia de seguridad, habrán de utilizar protección ocular, mascarillas FFP2, dos pares de guantes o incluso una bata especializada.

Y en el caso de rescates acuáticos, también se establecen protocolos concretos. En Barcelona se está practicando ahora con esnórquel (gafas y tubo de buceo) para algunas actividades de rescate. Y para los socorristas que se pasean por las playas para vigilar, en principio no se les exigirá mascarilla mientras se pueda garantizar la distancia de seguridad con los demás.