La Junta estudia instalar pequeñas depuradoras que den solución a vertidos de una decena de pueblos ribereños

RIBERA DEL DUERO

La Junta de Castilla y León estudia la instalación de pequeñas depuradoras para solucionar el problema con el que se encuentran casi una decena de pueblos ribereños que todavía vierten directamente sus aguas sucias a los ríos sin ningún tipo de filtro. Se trata de los municipios de Gumiel de Izán, Gumiel de Mercado, Quintana del Pidio, La Aguilera, Valdeande, Tubilla del Lago, Villalbilla, Sotillo, La Horra. Varios representantes de estos municipios se reunían este jueves con el delegado territorial de la Junta en Burgos, Roberto Saiz, para plantearle su interés en revertir la situación. Además del deterioro medioambiental de su entorno estos municipios se enfrentan cada año a multas de entorno a 3.000 euros por estos vertidos sin depuración.

Pese a que los alcaldes que acudieron a la reunión plantearon también la posibilidad de construir un colector que recogiera las aguas sucias de estos municipios y las condujera a las depuradoras de Aranda o de Roa, la obra parece inviable por su longitud y envergadura, que dispararía el presupuesto. La opción más adecuada parece ser la construcción de pequeñas depuradoras compartidas, para lo que la Junta trabajará en colaboración con los municipios afectados. Jesús Briones, alcalde de Gumiel de Izán es uno de los ediles que participaban en la reunión con el delegado territorial.

Jesús Briones insiste en que no se trata de evitar la sanción anual por el vertido a los ríos, puesto que la inversión necesaria va a suponer un coste muy importante, incluso mayor. El objetivo de estos pueblos es mantener su medioambiente en buenas condiciones, dado que supone una gran riqueza para el propio municipio por la vida que proporcionan. “No hay que olvidar que en nuestros ríos hay cangrejos, hay vida y que ahora con la pandemia los niños se están yendo a bañar allí. Lo que queremos es tener una naturaleza en buenas condiciones” asegura el edil gomellano.

El delegado territorial de la Junta en Burgos prometió a estos alcaldes la visita de técnicos de la administración regional para revisar el terreno y ofrecer alternativas.