Castilla y León suspende las fiestas patronales de sus municipios

Aranda de Duero

Era uno de los temas más controvertidos pero ya hay decisión al respecto: no habrá fiestas populares en ningún municipio de Castilla y León en lo que queda de año. De forma tajante lo anunciaba en la tarde de este viernes Francisco Igea,  vicepresidente de la comunidad, en la lectura del plan de medidas y control para hacer frente a la crisis del coronavirus en Castilla y León, y dentro de la nueva normalidad cuya normativa rigen las propias autonomías.

De esta forma, tanto Aranda de Duero como todos y cada uno de los municipios de la Ribera del Duero no podrán celebrar sus festejos durante los próximos meses, aunque siempre cabrá la oportunidad de realizar algún acto aislado -como los religiosos- en dichas fechas.

En la reunión mantenida con la Federación Regional de Municipios y Provincias se acordó este tema, en la que según Igea no hubo ninguna discrepancia. "Todos somos conscientes de lo que ha sido el coronavirus y de lo que hemos pasado", afirmaba. "Es un acuerdo y una recomendación, un signo de responsabilidad y solidaridad", añadía.

Pero, ¿cómo podrá controlarse que no se celebren fiestas espontáneas? El vicepresidente aseguraba que "todas las normas conllevan régimen sancionador. Contamos también con el auxilio de las fuerzas y cuerpos de seguridad y los cuerpos de inspección de la Junta, que pueden verse ampliados. Los propios interesados son los propios alcaldes porque nadie quiere volver al escenario de lo que hemos pasado en las últimas semanas. Un relajamiento de estas medidas puede provocar un foco de contagio, por eso llamamos a la responsabilidad", sentenciaba.