Desmantelan 3 talleres ilegales que reparaban móviles para comercios chinos
Estos dispositivos eran repartidos por establecimientos de telefonía móvil ubicados en Madrid y en el Polígono Industrial de Cobo Calleja en Fuenlabrada
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Imagen de uno de los talleres clandestinos desmanteladosPOLICÍA NACIONAL
Fuenlabrada
La Policía ha desmantelado tres talleres clandestinos que arreglaban teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos en el distrito de Usera y que eran empleados como servicios de reparación para establecimientos de la zona regentados por ciudadanos chinos.
En la operación, desarrollada de forma conjunta por la Policía Nacional, Municipal y la Agencia Tributaria, se ha detenido a tres personas, según informan en un comunicado.
La investigación comenzó cuando los agentes descubrieron la existencia de varios locales, situados en el distrito de Usera, que daban servicio a una multitud de establecimientos de telefonía regentados por ciudadanos chinos.
En estas tiendas se reparaban todo tipo de artículos informáticos que eran entregados a miembros de la organización encargados del transporte para distribuirlos entre los locales clandestinos.
Una veintena de trabajadores en situación irregular procedían a su reparación con piezas que vulneraban los derechos contra la propiedad industrial.
Con el avance de las investigaciones los agentes detectaron un garaje donde se producía la entrada y salida de ciudadanos de nacionalidad china portando teléfonos móviles.
Estos dispositivos eran repartidos por establecimientos de telefonía móvil ubicados en Madrid y en el Polígono Industrial de Cobo Calleja en Fuenlabrada.
La organización disponía de al menos otros tres talleres más, uno de los cuales era utilizado como tapadera de la organización para hacer pasar a los trabajadores de los talleres clandestinos como empleados de un taller textil.
Los agentes intervinieron todo tipo de material e infraestructura para la reparación y ensamblaje de componentes de telefonía móvil, relojes digitales y dispositivos informáticos.
Todos los locales tenían una disposición similar, salvo el último que contaba con maquinaria totalmente nueva, lo que denota que ha sido una actividad en constante proyección, debido a la mayor demanda.
Con esta actuación, los investigadores han dado por desarticulada la organización y el cese de una actividad opaca que "sin duda provocaba un gran perjuicio económico al sector".
