ldefonso López, ejemplo de una época que se pierde

Córdoba

Cuando nuestra esperanza de vida se encuentra en torno a los 85 años, aquellos que nacieron y crecieron en los años 30 y 40 comienzan a abandonarnos y con ellos, los valores encarnados de los pertenecientes a la conocida como generación silenciosa.

Y si hace unas semanas era Julio Anguita quien fallecía, esta semana pasada fue Ildefonso López García-Sotoca, cordobés de pro, amante de sus tradiciones y una persona empeñada, especialmente en los últimos años de su vida, en que toda una época que marcó a esa generación a la que le debemos tanto, no desapareciera con la muerte de sus miembros.

De Ildefonso sus amigos destacan su nobleza, empeño y saber hacer en un sindicato como la UGT se consolidara en la Transición, cuando la UGT era la UGT y no lo de ahora. Al final, bien fuera en la UGT, bien en la Fundación Paco Natera, su objetivo siempre fue uno: aportar su tiempo, conocimiento y valía para hacer una sociedad mejor.

Pero como les decía, sus últimos años de vida los dedicó con pasión a dejar a disposición, de manera abierta y accesible, la intrahistoria, el costumbrismo y "el sabor" de la Córdoba de los años 40, 50 y 60 fundamentalmente.

A través de Cordobapedia, creó, editó y transcribió centenares de artículos, anécdotas, biografías de personajes populares, recuerdos y chismes de una época que, gracias a la labor de Ildefonso, siempre permanecerá a disposición de cualquiera.

Esa contribución, generosa y siempre dispuesta de Ildefonso López fue también indudable herencia de su padre, el popular Marqués del Cucharón, que los más antiguos del lugar recordarán y sonreirán al rememorar sus memorables hazañas.

Córdoba pierde a uno de sus hijos que más orgullosamente trabajó por ella, de manera callada y discreta, como buen cordobés.

 Sirva su figura para rendir homenaje a toda una generación que se nos va yendo.

Descanse en paz.