El aeropuerto comienza a recuperar la normalidad de una temporada alta

Málaga

El aeropuerto de Málaga ya ha recuperado del 70 por ciento de los nueve mil empleos que ocupa directa e indirectamente. Durante los meses más duros de la pandemia la terminal redujo a tres mil las personas empleadas en el aeropuerto y empresas que prestan sus servicios.

La terminal malagueña comienza a recuperar poco a poco la normalidad. Este uno de julio, primer día de temporada alta, se han retomado los vuelos internacionales. De las 28 operaciones de aterrizaje y despegue se ha pasado a 123 en, apenas, 24 horas, 94 de ellas internacionales.

Desde este miércoles, además, el aeropuerto ha abierto la terminal T3, la más grande y moderna, tanto para salidas como para llegadas, el aparcamiento, la zona VIP y han vuelto a funcionar algunos comercios del interior de la terminal.

El aeropuerto confía en recuperar, este verano, el 75 por ciento de las 200 rutas habituales con las que opera. De momento, este mes de julio, ya alcanza los cien destinos y se han vuelto a realizar las conexiones con el 80 por ciento de los destinos europeos ahora el reto, según Pedro Bendala director del aeropuerto de Málaga lo importante ahora será recuperar la frecuencia de los vuelos.

Junto a la adaptación de las infraestructuras, el Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol ha implantado los protocolos recomendados por las autoridades sanitarias y de Transporte, tanto a nivel nacional como internacional, con objeto de garantizar la salud de pasajeros y trabajadores durante la recuperación operativa y de la movilidad.

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Estos protocolos incluyen, entre otras, medidas relacionadas con la limpieza y desinfección, distancia de seguridad, medios de protección, señalización e información, comunicación y adaptación de procesos.

En este sentido, ha desplegado carteles informativos en diferentes puntos de las instalaciones aeroportuarias y mensajes en las pantallas digitales recordando las recomendaciones sanitarias. Además, a través de megafonía, se informa cada cinco minutos a los pasajeros de la necesidad de llevar puesta la mascarilla en todo momento y de mantener la distancia personal en las diferentes dependencias aeroportuarias.

También se han colocado mamparas protectoras en aquellas zonas donde se produce una interrelación directa entre pasajeros y personal aeroportuario, dispensadores de gel hidroalcohólico, marcas y huellas de distanciamiento social.

Además, desde el pasado 15 de mayo, el Ministerio de Sanidad estableció controles sanitarios realizados por personal de Sanidad Exterior a los pasajeros que proceden del extranjero. Las competencias sanitarias y de uso de los datos de salud obtenidos en el ejercicio de estas funciones de control sanitario son de exclusiva titularidad del Ministerio de Sanidad, mientras que Aena aportará desde el 1 de julio los medios humanos y tecnológicos necesarios tanto para la instalación y uso de las cámaras termográficas, como para el desarrollo tecnológico del PLC (Passenger Location Card). Para el control de temperatura automático, la infraestructura malagueña dispone de 13 cámaras termográficas.

Las medidas establecidas, además de las de seguridad de las instalaciones, incorporan tres filtros de seguridad: de temperatura, en un proceso muy eficaz y de alto rigor; un control documental mediante el PLC, basado en las declaraciones responsables con información sanitaria que permite la trazabilidad o el seguimiento de la persona, y, además, un control visual. Además, los casos sospechosos pasan a un siguiente filtro donde personal sanitario valora la situación clínica y epidemiológica del pasajero.