Sin fútbol en las plazas riojanas

Logroño

La gestión de los derechos de imagen imposibilita ver la gran final por el ascenso a Segunda para aforos superiores a 50 personas

Fotters -plataforma de streaming de pago por visión de los partidos de Segunda B y de Tercera y que ha adquirido los derechos de emisión de los playoffs de ascenso exprés a Segunda y a Segunda B- se está poniendo en contacto con los clubes participantes en los playoffs de ascenso y con los ayuntamientos de las ciudades a las que pertenecen estos clubes para indicarles que no pueden emitir sus partidos fuera de locales hosteleros con un aforo superior a 50 personas.

Por tanto, la gestión de los derechos de imagen, en poder de Fotters, va a impedir el plan de muchos clubes y ayuntamientos de instalar pantallas gigantes en plazas al aire libre (máximo 1.000 personas) o pabellones a cubierto (máximo 500 personas) para que los aficionados, garantizando las medidas sanitarias establecidas en la normativa para esta nueva normalidad, puedan seguir estos partidos en la calle dado que la Federación Española de Fútbol ha decretado estos encuentros a puerta cerrada.

Fuentes consultadas en el Ayuntamiento de Logroño confirman a la Cadena SER que la intención del club blanquirrojo y de unas cuantas empresas de la región era aprovechar la gran final por el ascenso que van a jugar el 18 de julio Castellón y Logroñés para instalar pantallas gigantes en alguna plaza de la capital para disfrutar de este partido histórico para el fútbol riojano, siempre bajo las precisas medidas sanitarias que se establecen en esta ‘nueva normalidad’.

Desde el Ayuntamiento de Logroño confirman la negativa de la empresa de streaming para ofrecer esta señal en plazas y calles, y manifiestan su sorpresa ante la negativa por parte de la operadora que ha adquirido los derechos de imagen a establecer un canon que permita una gestión de la señal en estas fanzones. Footters ha remarcado, siempre según fuentes del Consistorio logroñés, que los partidos solo se pueden adquirir para verlos en casa o en locales de hostelería para un máximo de 50 personas.

Con esta negativa, el fútbol no profesional y modesto se enfrenta a un nuevo contratiempo social y económico al no disponer de una señal de televisión que le permita generar un mayor ambiente de fútbol entre sus seguidores y así aumentar el seguimiento a estos clubes del fútbol más modesto, e imposibilita al mismo tiempo a los clubes captar nuevos ingresos que pudieran surgir de patrocinios y de la venta de bebidas, comida y diversos productos de merchandising antes, durante y después de esta gran final por el ascenso.

Así que el fútbol modesto se aleja de la posibilidad, siempre con aforos limitados y siguiendo las medidas sanitarias aprobadas por el Gobierno de España para esta nueva normalidad, de vivir una fiesta futbolística en ciudades, como Logroño, que quieren recuperar el ambiente deportivo como elemento de unión, como seña de identidad y también como motor económico para sectores tan importantes, por ejemplo, como la hostelería.

La Unión Deportiva Logroñés no ha querido comentar nada al respecto de esta decisión y sigue trabajando para que la gran final por el ascenso pueda vivirse en un ambiente de fútbol siempre cumpliendo las medidas sanitarias aprobadas por las autoridades.