Los adolescentes reclaman atención para su formación y tiempo de ocio

Aranda de Duero

Construyendo mi futuro es un programa que desarrolla e impulsa la Concejalía de Acción Social de Aranda de Duero y que está dirigido a adolescentes de entre 12 y 17 años. Se desarrolla una programación de actividades adaptada a las peculiaridades del grupo y sus intereses, combinando acciones formativas con otras de carácter lúdico, basado en un modelo de cambio personal y grupal que permite constatar los resultados obtenidos.

Esta semana, este departamento se desplazó hasta el barrio de Santa Catalina con su educadora Sofía Palomino al frente. Después de detectar aspectos positivos y carencias o elementos a mejorar en distintas zonas, se trató de aplicar una serie de propuestas planteadas por los propios adolescentes. En este caso, se proyectó hacer algo con gente joven que se ha visto paralizada por la crisis del Covid19 y pintar algún muro deteriorado. Se detectaron dos con insultos y el proyecto pretendió sustituirlos por algo más visual y constructivo.

Sofía Palomino contó con el apoyo de los diseñadores gráficos de Hueso en Aranda para desarrollar los murales y conjuntamente con la asociación de comerciantes del barrio de Santa Catalina: “es arte urbano, humilde, pero lo hacen los chicos con mucha ilusión y cada uno ha hecho su aportación”.

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En Aranda, el programa ‘Construyendo mi futuro’ acoge a “tres grupos con un total de 42 chavales como cifra global. Es una actividad preventiva, estamos en contacto con los institutos y centros escolares para detectar si hay adolescentes a los que podemos ayudar trabajando habilidades sociales y se les intenta motivar para su presente y pensando en su futuro. Además estos grupos de chavales han realizado una propuesta para que desde el Ayuntamiento se impulsen actividades dirigidas a este sector de los jóvenes”.

Irene y Sinaí, dos de las integrantes de estos grupos de ‘Construyendo mi Futuro’, explicaron en la Cadena SER que estuvieron “retirando insultos de las paredes y sustituirlos por dibujos con corazones y palabras como sueño o libre. Son elementos positivos”,

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Ambas reivindicaron a sus 15 y 16 años años que “hay actividades para niños más pequeños y para personas mayores en Aranda pero nada para gente de nuestra edad. Y hemos planteado actividades para que tengamos algo de entretenimiento y no hacer siempre lo mismo. Hay que pensar en algo para saber dónde ir y qué hacer. La única actividad que podemos hacer ahora es salir para sentarnos y ver a más gente porque no hay nada más que hacer. Nos falta con qué divertirnos”.