Desarticulado en Elda un grupo criminal dedicado al tráfico de drogas
La operación contra el menudeo de drogas se salda con 32 detenidos y 8 investigados
Desarticulado grupo criminal en Elda / Cadena SER
Elda
Dentro de los planes de prevención sobre la venta de drogas al menudeo, que lleva a cabo la Guardia Civil de Cuenca, se ha detenido a un total de 32 personas (19 hombres y 13 mujeres), e investigado a otras 8 (4 varones y 4 mujeres), una de ellas menor de edad), en el marco de la operación denominada “Mac-Over”.
La investigación se inició en el mes de noviembre del pasado año, cuando dentro de un servicio de prevención contra la delincuencia, llevado a cabo por una patrulla de la Guardia Civil de Mota del Cuervo, se detectó, como un vecino de dicha localidad podría estar dedicándose al tráfico de drogas al por menor en la zona, vendiendo cocaína, marihuana y hachís.
En virtud de esa información, el Equipo ROCA de la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca, ubicado en esa zona de la comarca de la Mancha conquense, se hizo cargo de la investigación. Tras varios meses de intensas y dificultosas gestiones, los agentes pudieron comprobar, que alrededor de este ilícito penal, había una trama criminal, que se extendía a varias zonas de España, y donde convergían varios grupos de delincuentes.
Modus Operandi: La primera trama criminal, estaba formada por varios individuos, la mayoría de ellos, con antecedentes policiales por tráfico de drogas y delitos contra el patrimonio, asentados en Mota del Cuervo, y con una ramificación en Quintanar de la Orden, sus miembros, vendían directamente la droga a los consumidores, a la vez que abastecían a pequeños “camellos” de la comarca.
Algunos de los detenidos en la comarca manchega, se desplazaba asiduamente, prácticamente de forma semanal, a Elda, en donde a través de dos puntos de compra, se abastecían de marihuana y cocaína, manipulando, esta última, mediante sustancia de corte, para proceder a su venta al menudeo.
En relación a los puntos de venta de la provincia de Alicante, donde cada uno de ellos formaba una organización criminal propia, se trataba de dos viviendas ubicadas en La Tafarela y la Torreta.
Tras distintas vigilancias se averiguó que en la primera de las viviendas, residía un matrimonio de mediana edad, ambos con antecedentes policiales por tráfico de drogas, al igual que con las personas domiciliadas en la Torreta, también una pareja, en este caso más joven, pero ambos con antecedentes por este tipo de hechos.
