Castilla y León rinde en Segovia homenaje a las víctimas de la Covid-19

Segovia

A las diez de la mañana daba comienzo en los Jardines de los Zuloaga el acto de Homenaje de Castilla y León a todas las víctimas y afectados por la COVID-19, así como de reconocimiento a todos los que luchan a diario contra esta pandemia. Bajo la presidencia del jefe del Ejecutivo autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, y con la presencia de las principales autoridades de la Comunidad, el acto ha estado protagonizado por las intervenciones de tres representantes de las víctimas, los supervivientes de la enfermedad y los profesionales que se enfrentan a ella.

En nombre de los familiares de fallecidos por la COVID-19, el encargado de dar testimonio en su recuerdo ha sido Eduardo Estévez, quien perdió a sus padres durante los peores meses de la pandemia. Quien resaltaba que “hemos perdido una generación de personas valiosas recordemos su aportación a lo que Castilla y León es hoy que con su esfuerzo han contribuido a lo que es hoy nuestra tierra”.

En representación de los profesionales de la sanidad y otros colectivos profesionales que han estado y están en primera línea de la lucha contra esta crisis sanitaria ha intervenido Eva Ferreira, médico internista del Hospital de Segovia. “La cooperación, la unidad de esfuerzos, el remar juntos en la misma dirección nos han dado fuerzas para continuar día a día sin rendirnos, para no dejarnos vencer por el miedo”. Agradecía el reconocimiento pero hacía hincapié en que a pesar del esfuerzo realizado se han tenido que lamentar muchas pérdidas. En nuestra Comunidad los fallecidos suman 3.793.

Y por último, de entre los numerosos afectados que han superado la enfermedad, ofrecía su testimonio Fernando Gil que ha centrado su intervención en remarcar que cada afectado por Covid ha vivido la enfermedad de forma diferente. “He aprendido a valorar la vida como nunca. La vida me da dado una segunda oportunidad”, resaltaba.

El acto, que ha contado con la presencia de unos 200 invitados de toda la Comunidad, culminaba con una ofrenda floral, la lectura de un poema del escritor abulense José Jiménez Lozano, Premio Cervantes, y un minuto de silencio en homenaje a todas las víctimas.