Un adiós muy humano

Vigo

Hace unos días, la familia de Flocky tuvo que decirle adiós a su compañero. El gran cariño que sienten por su mascota les ha llevado a un tanatorio y crematorio de animales domésticos para dedicarle un último adiós muy especial a su amigo más fiel. La incineración de mascotas es una práctica que cada vez más propietarios de animales eligen debido a la ley que prohíbe enterrar a los mismos. Existen dos modalidades de incineración: la colectiva, en la que se incineran varios cuerpos a la vez, y la individual que permite la recuperación y entrega de las cenizas al propietario. Cremandogal es uno de los crematorios que se encarga de la recogida y transporte de la mascota y procura hacer la pérdida lo más fácil y cómoda posible. Los dueños de estos pequeños miembros de la familia pueden llevarse también a casa, como recuerdo, un ornamento con la patita de su mascota e, incluso, un collar con sus cenizas. Tener cerca las cenizas de su animal es un consuelo para muchos. No cabe duda de que nuestras mascotas merecen una buena despedida que les devuelva, al menos en parte, el amor que ellas compartieron con nosotros.