El otoño no será frío en el Mediterráneo, lo que podría ayudar a controlar el coronavirus

Valencia

Los veranos serán cada vez menos soportables, sobre todo en el Mediterráneo. Lo dice Jorge Olcina, catedrático de análisis geográfico de la Universidad de Alicante, que advierte de que en los próximos años lo habitual será que las máximas en esta estación no bajen de los 32 grados, y lo que es más significativo, con mínimas que no bajen de los 24. Aunque no serán veranos tórridos, nos esperan, dice, registros de temperaturas que hasta ahora eran impensables.

A pesar de que este verano está siendo algo distinto en lo meteorológico, con tormentas al inicio de verano (que vinieron acompañadas incluso de granizo) y con una ola de calor que no llegó hasta iniciado agosto, Olcina, a falta del balance definitivo, augura un mes con temperaturas por encima de la media.

Otoño templado que ayudará al coronavirus

Respecto al otoño, Olcina cree que es difícil precisar cómo se presentará en cuanto a lo meteorológico. Los modelos de predicción americanos auguran un otoño cálido y seco, pero él no se fía porque el tiempo en el mediterráneo en otoño siempre depara sorpresas.

Sorpresas siempre en forma de gota fría, y además cada vez más violentas. Por eso, afirma, conviene estar preparados. Y es que el cambio climático no ayuda. Una atmósfera cálida puede precipitar en pocos días fenómenos adversos y precipitaciones de hasta 300 litros por metro cuadrado en pocas horas:

Lo que parece seguro es que las temperaturas serán suaves, una buena noticia explica Olcina, para acotar la pandemia del coronavirus.