Alcaldes ribereños piden a la Junta que revise el confinamiento de Aranda por los perjuicios a la comarca
Solicitan que se corrija la prohibición que deja a las poblaciones cercanas sin los servicios básicos que les presta la capital de la comarca, entre ellos la compra de alimentos
Los ediles ribereños también comunican su preocupación por la movilidad incontrolada pero forzosa que obliga a los vecinos a ir de pueblo en pueblo buscando suministros
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Castrillo de la Vega / Google Maps
RIBERA DEL DUERO
Los problemas que el confinamiento de Aranda está generando en los municipios de la comarca llegarán por escrito a la Junta a través de un escrito promovido por el alcalde de Castrillo de la Vega y que está siendo suscrito en las últimas horas por otros ediles de la comarca. En la carta piden a la Junta alternativas a los problemas de acceso servicios básicos que están sufriendo sus poblaciones como consecuencia del confinamiento de Aranda.
Los alcaldes que suscriben la carta critican el “poco acierto” de la forma en que se ha aplicado el confinamiento de Aranda a la vista de los problemas que está generando en el acceso de la población del entorno a servicios básicos como la compra de los alimentos del día a día. Detallan que esta prohibición obliga a vecinos de bastantes localidades a desplazarse más de 30 kilómetros para abastecerse, con la incertidumbre de si encontrarán los productos que necesitan dado que las pequeñas tiendas rurales tienen una capacidad de abastecimiento limitada. Un problema que sufren especialmente las personas mayores, a los que, según los alcaldes que refrendan esta carta, estas medidas “aíslan y desprotegen aún más y les dejan desprovistos de sus necesidades básicas ya que ellos, a menudo, no tienen capacidad para desplazarse tan lejos.”
Recuerdan los firmantes que ni en el estado de alarma se prohibió acudir a Aranda con medidas de precaución para realizar estas compras y argumentan que no se entiende el rigor actual cuando la población de los pueblos demostró entonces su responsabilidad.
Por otra parte el escrito alerta de que la restricción de acceso a Aranda provoca una movilidad incontrolada pero forzosa entre los pueblos de la comarca que preocupa a los alcaldes porque se corre el riesgo de “ir sembrando por la comarca los contagios involuntarios, pero no carentes de riesgo”.
Con estos argumentos solicitan a la Junta que a la mayor brevedad posible se tomen medidas adecuadas que supongan alternativas coherentes para dar solución a estas quejas.
