Niños más miedosos

Zaragoza

Incluso antes de la pandemia, el primer día de colegio podía ser difícil para los más pequeños. Enfrentarse a un espacio nuevo, con profesores desconocidos lleva cada año a algunos niños a llorar a las puertas de los colegios al separarse de sus padres. Este año, se suman las mascarillas, los hidrogeles y los meses de confinamiento y de contactos sociales limitados, con lo que resolver la ecuación puede ser aún más complicado.

Es lo que temen algunas profesoras de infantil y lo confirma la psicóloga clínica del Salud, especializada en psicología Infantil, Luisa Maestro. Maestro explica que "los niños han pasado una temporada muy larga en casa y eso ha sido un momento de sobreprotección porque no se han tenido que enfrentar a ningún tipo de estrés asociado al ámbito escolar". "Por ejemplo, relacionarse con otros niños que en un momento dado les pueden parecer amenazantes, enfrentarse a una profesora que actúa como figura de autoridad", continúa, "con lo que ahora, comenzar de nuevo el colegio les va a costar".

Por eso, aunque la mayoría están deseando volver al colegio, puede ocurrir que algunos se nieguen, como ocurrió con los niños que no querían salir de casa cuando se autorizaron los primeros paseos de una hora.  Luisa Maestro advierte a los padres que tengan en cuenta que el "colegio" al que van a volver ahora los niños tampoco es exactamente el mismo que el que dejaron en marzo. Los cambios y las medidas de prevención también pueden provocar inquietud a los pequeños.

Otros miedos evolutivos

La pandemia y los meses de confinamiento y de distanciamiento social están llevando a que algunos niños sean más miedosos que antes. No se trata sólo del miedo a acudir al colegio, sino de otros miedos más o menos habituales en los pequeños, como el miedo a la oscuridad, a los monstruos, a quedarse solos... Son los miedos que los psicólogos denominan "evolutivos", es decir, que suelen aparecer a determinadas edades de los niños y desaparecen conforme van creciendo.

Esta psicóloga infantil subraya que es fundamental que las figuras de apego de esos niños, principalmente los padres, les transmitan seguridad, tanto en la vuelta al cole como ante cualquier otro miedo. "Un error frecuente puede ser", advierte, "dejarles evitar aquello que les da miedo". "Sin embargo, en el momento que un niño deja de hacer cosas que podría hacer por edad y porque antes ya las hacía", señala, "ese miedo se va a hacer fuerte y va a ser más difícil superarlo".