Arranca el Zamora CF 2020-21

Zamora

 El Zamora CF temporada 2020-21 arranca este jueves. Tras un último aplazamiento, se confirmó el 10 de septiembre como día de inicio de la pretemporada. Y si ya es habitual, esta vez con más motivos que nunca, lo primero serán los análisis y reconocimientos médicos a toda la plantilla.

 Una plantilla que apenas ha variado respecto a la que conseguía el ascenso a Segunda B el pasado 25 de julio en La Balastera, y que seguirá bajo las órdenes de David Movilla.

 Arranca de esta manera para el Zamora una temporada cargada de incógnitas. No se conoce el calendario, ni hay seguridad absoluta de poder empezar la competición cuando se pretende, el fin de semana del 17 y 18 de octubre.

 Tampoco se sabe si, de momento, los encuentros serían a puerta cerrada, o con un aforo limitado, y con qué límite. Eso ha impedido comenzar hasta ahora la tradicional campaña de socios.

 Tampoco hay de momento señalado con solo una cita programada (Memorial Agustín, el 30 de septiembre), aunque sí  con una concentración prevista en Sanabria del 21 al 26 de septiembre.

 Hay que recordar que los rojiblancos llegan a una Segunda B totalmente distinta: de 5 grupos, con un total de 102 equipos, y el Zamora ha sido encuadrado en el Grupo I, subgrupo A, con los tres equipos salmantinos (Guijuelo, Salamanca UDS y Unionistas), y los 6 gallegos de la categoría: Pontevedra, Celta B, Coruxo, Rácing de Ferrol, Compostela, y el gran favorito, Deportivo de la Coruña. En el otro subgrupo se ha situado a los otros 4 equipos de Castilla y León (Cultural Leonesa, Numancia, Burgos y Valladolid B), y los 6 asturianos de la división de bronce.

 Tras la primera fase en la que se enfrentará a sus nueve rivales a ida y vuelta, la clasificación al finalizarla determinará si en la segunda fase podrá luchar por ascender a Segunda A, a la nueva categoría intermedia denominada Segunda B Pro, quedarse en la Segunda B (que en la temporada 2020-21 será la cuarta del fútbol nacional) o, en el peor de los casos, tendrá que pelear por no volver a una tercera división que será ya la quinta categoría.

 Y todo ello, dependiendo de las negociaciones entre la RFEF y el CSD cara al protocolo de seguridad sanitaria que permita que pueda desarrollarse la competición. Las últimas noticias (de la tarde de este miércoles) indican un princpio de acuerdo, pero dejando al margen el tema clave: las pruebas PCR (su obligación y sobre todo, quién las pagará).