Las 'colas del hambre' no terminan

Madrid

La asociación de Puerto Chico, en el barrio de Aluche, comenzó en marzo a repartir alimentos y productos de primera necesidad a los vecinos que lo necesitaban. Los responsables y la veintena de voluntarios no creen que el final de la iniciativa esté cerca porque ven repetirse cada sábado de los últimos seis meses las mismas 'colas del hambre'. 

Eladio, de 20 años, es una de los centenares de personas que rodean con sus carros el pequeño local de la asociación. El joven hace un curso de carpintería para mantenerse ocupado. Ni sus padres ni él tienen trabajo: "Nunca hemos tenido mucha pasta, pero hemos llegado a esto con la pandemia". Eladio va cada semana a por sus cestas de comida: "es una ayuda, aunque no creas que te dan mucho".

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El almacén del colectivo se puede llenar diariamente gracias a las donaciones de comida en los supermercados del barrio y el apoyo de una empresa cárnica. Sin embargo, el presidente de la A.V. Puerto Chico, Blas Montalbo, denuncia que las administraciones en general y la Junta Municipal de Distrito en particular no colaboran con ellos de ninguna forma: "la Junta nos ha dado una placa de reconocimiento, pero se la hemos devuelto". Montalbo también lamenta que el número de demandantes de ayuda se mantiene, alrededor de 600 familias, pero la cantidad de donaciones se reduce por la "situación horrorosa" en la que se encuentran vecinos y comerciantes de la zona.