'Querida fosfina'

Las Palmas de Gran Canaria

Hoy voy a escribirle una de mis cartas a nuestra nueva vecina:

Querida fosfina,

Acabamos de enterarnos de que eres la chica nueva del barrio, de la Vía Láctea. Ya sé que eres un derivado fétido y tóxico del fósforo, que tienes que oler a huevos podridos y que estamos a una distancia de 40 millones de kilómetros. Pero me hace ilusión tener a otro posible ser vivo cerca, aunque estés en Venus. Según los científicos, eres la primera evidencia de vida extraterrestre y si tenías pensado venir a nuestro planeta mejor que ni te molestes porque desgraciadamente los extranjeros no suelen ser muy bienvenidos.

Aquí también hay algo que huele a podrido y no eres tú, mi querida fosfina, sino el racismo que desgraciadamente campa a sus anchas, como un gas galáctico. Infectando a personas que no son racistas pero que tienen actitudes de odio hacia otros simplemente por su lugar de procedencia. Con frases como "que los devuelvan a sus países", "aquí no cabemos todos", "yo también quiero unas vacaciones pagadas" o "vienen a robarnos o a quitarnos el trabajo".

Aquí desgraciadamente hay mucha gente que tiene sentimientos racistas y ni lo reconoce. Gente que se alarma porque otras personas, sin nada, son acogidos en hoteles pero que no sintieron ni la más mínima pena cuando las vieron tiradas en el suelo en mitad de un muelle, sin sombra y sin humanidad cerca donde cobijarse.

No sé en Venus, pero aquí, en la Tierra, tenemos a mandatarios que alimentan estos sentimientos con su inacción. Que consideran que tener semanas a alguien, entre ellos niños y embarazadas, tiradas al sol es "un pequeño percance". Que son problemas secundarios que sólo hay que tratar cuando se tenga hueco suficiente en la agenda. Y no son un problema secundario, porque hay personas que trafican con otras y, por ahora, se está haciendo más bien poco para acabar con eso. Así que la situación en este planeta azul es que acusamos de delicuentes y ponemos todo nuestro odio sobre las víctimas.

Querida Fosfina, sé que esto huele fatal, posiblemente como tú. A muchos en la Tierra nos da gana de mudarnos a Venus. No sé si allí nos tratarían igual como se tratan a los extranjeros pobres aquí. Espero que en tu planeta no sea la cosa igual y podamos decir que en nuestro sistema solar hay vida inteligente .

Atentamente, tu terrícola, David Perdomo.