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20.000 personas de Arquitecte Bennàssar afectadas por las nuevas restricciones

Solo se podrá salir de la zona perimetrada para ir al trabajo, la escuela o al médico y las reuniones se limitan a cinco personas

Palma

Desde este viernes a las diez de la noche las 20.000 personas que residen en cuatro zonas que dependen del centro de salud Arquitecte Bennàssar estarán sometidos a las mismas restricciones que ya rigen en Son Gotleu. Solo se podrá salir de la zona perimetrada para ir al trabajo, la escuela o al médico, las reuniones se limitan a cinco personas y los comercios y bares tendrán que cerrar a las diez. Nuevo toque de queda en el centro de Palma en una de las zonas más densamente pobladas de la comunidad. Casi 43.000 personas en Palma estarán afectadas a partir del viernes a las diez de la noche por medidas restrictivas, un 9% del total de la población de la ciudad

El perímetro se incluye todo el barrio de Son Forteza sur, la mitad de la plaza de Toros, la mitad de Archiduc y algunas calles de Son Oliva. Las restricciones más destacadas son la limitación de las reuniones a un máximo de cinco personas, el toque de queda para los restaurantes y comercios a las diez de la noche, la suspensión de los actos religiosos o la recomendación de salir de casa solo para lo imprescindible. Medidas que según la directora general de Salud Pública, Maria Antònia Font, no son fáciles de aplicar y que se han tomado teniendo en cuenta criterios epidemiológicos, sociales y asistenciales. La zona de salud multiplica ahora por siete la incidencia acumulada de casos con respecto al mes de agosto.

El centro de salud de Arquitecte Bennàssar tiene adscritas más de 31.000 tarjetas y abarca una de las áreas con mayor densidad de población de la comunidad autónoma y es uno de los centros con mayor presión asistencial. Además de las restricciones, también se llevarán a cabo visitas puerta a puerta donde se han detectado más casos positivos, así como puntos de información a pie de calle y en los establecimientos de alimentación. Font no descarta que, en función de la evolución de la epidemia, algunas medidas se tengan que prolongar más allá de 15 días.

El alcalde de Palma, José Hila, ha explicado que habrá una dotación de 20 agentes de la policía local para controlar la situación, a los que se sumarán efectivos de Emaya que se encargarán de la desinfección de las zonas comunes. Hila ha hecho un llamamiento al cumplimiento de las medidas.

La mayor parte de las infracciones detectadas en Son Gotleu durante estos primeros días sigue siendo la falta de mascarillas o el fumar en la calle.

 
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