Triunfo del GC en la prórroga (107-102)
Andrew Albicy, Amedeo Della Valle, Stan Okoye, Beqa Burjanadze y Matt Costello fueron los primeros cinco escogidos por Porfi Fisac en el estreno del nuevo proyecto claretiano.

GC / GC

Las Palmas de Gran Canaria
Fue Kulboka, ala-pívot rival, quien abría el marcador anotando tras rebote ofensivo. El rebote sería, precisamente, uno de los puntos débiles del equipo claretiano en el transcurso del partido. Sin embargo, los de Fisac mostraron muchas otras armas defensivas, secando al conjunto bilbaíno y ampliando la distancia con un acertado Matt Costello (8-2, minuto 3) en los compases iniciales.
Stan Okoye recogía el testigo, firmando dos triples casi consecutivos y disparándose hasta los 8 puntos en su cuenta personal. El nigeriano asumía responsabilidades ofensivas y ponía la máxima diferencia en siete puntos. Los de Mumbrú iban encontrando poco a poco su sitio en el ritmo de juego. La falta de acierto exterior la suplían con superioridad en la pintura. Tal era que Costello y Wiley se veían rápidamente lastrados con dos faltas cada uno, teniendo que jugar Olek Balcerowski como tercer pívot en la rotación solo en el primer cuarto. Una canasta de mérito del polaco, y un triple de Beirán, cerraban el acto inicial con buenas sensaciones en el lado amarillo (25-19).
No le sentó bien al ‘Granca’ el parón entre cuartos. El RETAbet Bilbao Basket inauguró el segundo acto convirtiendo dos bandejas consecutivas muy fáciles ante la mirada de la defensa claretiana. Fisac apretaba desde la banda y encontraba respuesta a su acicate en ataque. Con Della Valle y Okoye de nuevo sobre el parqué, los grancanarios anotaban con mayor fluidez (33-28, minuto 14) para mantener la ventaja claretiana.
El conjunto vasco, no obstante, peleaba bien para evitar que se abrieran brechas significativas. Okoye seguía a lo suyo y se iba hasta el 4/4 en triples, dinamitando el choque. La defensa isleña brillaba y asfixiaba a los bilbaínos (52-39, minuto 19) forzando el tiempo muerto de Mumbrú a poco menos de dos minutos del descanso. Un triple en transición de Kulboka permitía a los visitantes respirar algo más tranquilos al descanso (53-43).




