El profesor de tauromaquia acusado de abusos sexuales pide cambiar la cárcel por arresto domiciliario

Murcia

El profesor de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia en prisión como presunto autor de abusos sexuales a una decena de alumnos y alumnas ha pedido cambiarla por arresto domiciliario, alejamiento que le prohíba acercarse a menos de 500 metros de los estudiantes y retirada del pasaporte.

En un recurso ante el juzgado de instrucción de Murcia que investiga los hechos y que deberá resolver la Audiencia Provincial, su abogado, Manuel Martínez, expone que por sus dolencias la permanencia en la cárcel puede conducir a un fatal desenlace, según han indicado a Efe fuentes cercanas al caso.

Señala también que una medida tan gravosa como la prisión preventiva en la que está desde el 11 de septiembre puede ser sustituida por otras capaces de conseguir los mismos efectos pretendidos, como evitar el riesgo de fuga y el de reiteración delictiva.

En cuanto al riesgo de que su defendido pueda sustraerse a la acción de la justicia, comenta que cumplirá pronto 70 años, convive con su esposa y su hijo y carece de medios económicos, al recibir solo la prestación por incapacidad absoluta que tiene reconocida.

Añade el recurso que contribuye también a disipar ese peligro su delicado estado de salud, pues ha sufrido un ictus que lo obliga a tomar varios medicamentos y presenta un cuadro clínico de trastorno de ideas delirantes, según se recoge en un informe médico.

El letrado propone que se le prohíba a acercarse a menos de 500 metros de la plaza de toros de Murcia, donde tradicionalmente se imparten las clases, y que se le coloque una pulsera con sistema de posicionamiento global por satélite que permita comprobar que cumple con esa obligación, así como la personación periódica en el juzgado.

Con las medidas propuestas, resumen, se protege a las víctimas, la mayor parte de ellas menores de edad cuando se cometieron los abusos, no se impide el desarrollo normal de las investigaciones y se vela por la salud del afectado.

El encarcelado fue detenido por la Policía Nacional en la puerta de caballos del coso de La Condimina el pasado 8 de septiembre tras la denuncia anónima de que varios alumnos podrían estar sufriendo abusos sexuales.

Tres días después, el juzgado de guardia ordenaba su ingreso en prisión por la gravedad de los hechos y las elevadas penas que podrían serle impuestas caso de ser hallado culpable y en evitación del riesgo de fuga, destrucción de pruebas y reiteración delictiva.

Segundo registro de su vivienda

La Policía Nacional ha registrado este viernes por segunda vez el domicilio del colaborador de la Escuela de Tauromaquia de Murcia en prisión desde hace dos semanas como presunto autor de abusos a una decena de alumnos y alumnas.

Los vecinos de la zona han dicho a Efe que han visto salir a los agentes con varias cajas de la vivienda ya registrada el pasado 8 de septiembre, cuando fue detenido en la puerta de la plaza de toros de Murcia, donde los alumnos de la escuela recibían las clases.

Aquel día, los investigadores intervinieron el teléfono móvil que llevaba y luego otros tres que se encontraban en el domicilio, al que el detenido ha vuelto este viernes para ser testigo.

El juzgado de instrucción de Murcia que dirige las investigaciones ha autorizado el registro y dado traslado a la fiscalía y a la defensa de la solicitud de la directiva de la escuela para que se le permita personarse en las actuaciones como acusación particular.

La policía había solicitado este nuevo registro en busca de otro material que pudiera reforzar los indicios o vestigios con los que ya cuentan, sobre los que nada ha trascendido, dada la discreción con la que se llevan a cabo las investigaciones.

El encarcelado preventivamente se enfrenta a un proceso judicial en el que se le investiga como presunto autor de los delitos de abusos y agresión sexual, tenencia o difusión de pornografía y coacciones, lo que ha negado.