Sin cajeros ni sucursales: el único municipio sin rastro de banca es Betancuria
Tras la disolución de La Caja Insular de Canarias para integrarse dentro de Bankia, los 700 vecinos de ese municipio de Betancuria tiene que desplazarse en coche durante media hora para llegar hasta la oficina más próxima
Tenerife
Salir de casa para ir al cajero. Esa acción sencilla y habitual en cualquier pueblo y ciudad del país hace más de una década que en Betancuria no se puede practicar. Con la disolución de La Caja Insular de Ahorros de Canarias y su integración en Bankia, la entidad decidió retirar su única presencia en ese municipio que supera, por poco, los setencientos habitantes.
"Recuerdo al principio que el cajero ni funcionaba la mitad de las veces", recuerda el actual alcalde del muncipio Marcelino Cerdeña: "a partir de ahí nunca hubo sucursales ni más cajeros", lamenta.
Para superar la ausencia de este servicio, los vecinos tienen que trasladarse hasta el municipio de Antigua, a una media hora de coche; también hasta Puerto del Rosario. "Supone una incomodidad, aunque la gente se ha programado y saca el tiempo; cada uno se organiza como puede, pero no deja de ser una incomodidad", reconoce, al mismo tiempo que lamenta que "son inconvenientes como consecuencia de la poca población, al igual que tampoco tenemos farmacia".