El centro de acogida La Esperanza permanece cerrado tras las obras de reforma

Algeciras

El partido socialista vuelve a preguntar en Algerciras por el incumplimiento del convenio firmado en 2015 entre Ayuntamiento y obispado de Cádiz. El grupo municipal socialista ha lamentado volver a comprobar que el equipo de gobierno, encabezado por el alcalde del PP José Ignacio Landaluce, sigue consintiendo al Obispado el incumplimiento del convenio firmado en 2015 referente a la casa de acogida La Esperanza, en la barriada de Pescadores.

El pasado mes de enero el PSOE logró que el equipo de gobierno le requiriese al Obispado para que pagase la parte a la que se comprometió en el convenio firmado en 2015 tras la restauración de esta casa de acogida. Entonces el Ayuntamiento desembolsó 31.000€ y la Diócesis de Cádiz y Ceuta se comprometía a devolverle 9.000€ que a día de hoy siguen sin haber sido abonados.

"La casa de La Esperanza suma ya siete años cerrada. Esto no tiene explicación ninguna y menos aún en estos momentos. Algeciras necesita un albergue en el que atender a personas en riesgo de exclusión social. Es incomprensible que el Ayuntamiento gaste el dinero de todos en la rehabilitación de esta casa perteneciente al Obispado y que tras las obras la mantenga cerrada con la necesidad que existe en la ciudad", ha señalado el viceportavoz municipal socialista Fernando Silva.

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"El actual alcalde demuestra una vez más que es duro con los débiles y blando con los fuertes. Han pasado diez meses desde que el Obispado está requerido a cumplir el convenio de 2015, y no hay resultado alguno. Lo que comprobamos hoy en la comisión de Urbanismo es que al gobierno de Landaluce le molesta incluso ya que preguntemos por este asunto. A ver si el alcalde nos explica por qué tiene un centro tan necesario como este cerrado a cal y canto y ni siquiera consigue que el obispado pague su parte", añade Fernando Silva.

Los socialistas reiteran su preocupación por la tardanza en la reapertura de este centro tan necesario y exigen respuestas al alcalde y a su equipo de gobierno.

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Por el programa ha pasado, además del propio Silva, una de las voluntarias que participó durante años de la actividad de la Casa de la Esperanza, Guita Taha, que junto a Gloria Masallá ha recordado los momentos de gran solidaridad vividos en esta casa que permanece cerrada a cal y canto después de una importante inversión.