La Arandina despide la pretemporada con derrota

Aranda de Duero

No fue la despedida soñada. La Arandina salió derrotada de su último encuentro de pretemporada. Lo hizo ante el Tordesillas, que con un gol de Torres en la segunda parte se llevó las mejores sensaciones de un choque un tanto aburrido.

Los primeros minutos fueron disputados, pero sin profundidad. Dos equipos que se probaban con miras al once titular del estreno liguero en sus respectivos subgrupos. El primer acercamiento llegó sobre el cuarto de hora y de color rojiblanco; Julio probó suerte desde la banda derecha. Su centro chut fue despejado por Curro a córner. La réplica vino instantes después, con un remate de Iván Martínez tras una buena jugada trenzada por Sagüés y Santín que se marchó por línea de fondo.

Hubo que esperar hasta casi el final del primer tiempo para ver la siguiente acción de peligro, que nuevamente fue blanquiazul, y a través de una falta directa. Zazu estampaba el cuero en el larguero. Hasta el momento la mejor ocasión del encuentro. Con todo, se fue al descanso.

Sin gol

El segundo tiempo comenzó siendo una réplica del primero. Sin muchas oportunidades, con intensidad, pero sin profundidad. Ambos equipos movieron el banquillo. Torres fue el único en inquietar la meta rival, en este caso la ribereña, defendida ahora por Maxi San José. Y fue el propio jugador vallisoletano quien, en un mano a mano, minutos después de hacer primer aviso, batía al guardameta por bajo en un uno contra uno. 0-1.

Y pudo ser peor. Porque Torres, tras un error defensivo de la Arandina, también pudo hacer el 0-2, pero Maxi blocó. Los locales trataron de revertir la situación pero se encontraron con Oliver y la falta de puntería en las más de tres oportunidades de las que dispusieron. La situación evidencia solución ante la falta de gol; algo más debe llegar para completar un ataque que aún sigue gestándose. Corregir errores en defensa también se antoja vital para no perder puntos en una temporada en la que sumar desde el primer encuentro será imprescindible para luchar por el ascenso.