La covid provocará un incremento de intentos de suicidio a medio y largo plazo

Zaragoza

Objetivo: salvar vidas. El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón ha puesto en marcha una estrategia para prevenir el suicidio. Cada año se producen a Aragón una media de 113 suicidios. Se estima, además, que la Covid incrementará a medio y largo plazo esta cifra. Los datos son inquietantes: se produce un suicidio uno de cada 3 días y por cada muerte se atienden 20 tentativas.

Según la psiquiatra Isabel Irigoyen - coordinadora autonómica de la Estrategia de prevención del suicidio en Aragón - , los hospitales atienden todos los días entre 7 y 8 intentos fallidos de suicidio. La incidencia es alta y suponen el triple de las muertes por accidente de tráfico pero lo más importante es que en el 90 % de los casos se pueden prevenir.

Hay que estar preparados porque todo indica que se van a incrementar: "Las personas que han estado infectadas, que han perdido a familiares y que no han podido pasar el duelo ni despedirse ni cuidarles, van a ser personas que realmente van a tener más riesgo". Además, "las personas que ya tenían enfermedades psiquiátricas previas se les puede incrementar", ha señalado Irigoyen.

Asimismo, "también quiero hacer mención a todas las personas que están en primera línea de batalla, las que están más expuestas al coronavirus por su trabajo", ha añadido.

El paciente tiene un sufrimiento que se le hace insoportable y para el que no ve ayuda posible. Por ello, se va actuar con líneas de prevención, como mensajes en los medios de comunicación, barreras telemáticas y farmaceúticas. 

Los adolescentes son uno de los principales grupos de riesgo por "la propia etapa de la  vida, que es compleja, en la cual hay que ir adaptándose a muchos cambios", recuerda esta psiquiatra. Recientemente, "en la última década, es un grupo especialmente de riesgo por el ciberacoso y el acoso desde iguales".

Los profesionales dispondrán de un registro de suicidios y de un protocolo de actuación que incluirá una escala de riesgo. Se trata de ver las señales, remarca. "A veces son mensajes directos" como "'me quiero morir' o 'preferiría estar muerto'" y otras veces "pueden ser indirectos, como ir al notario o dejar de cumplir tus obligaciones religiosas".