Trenasa: los grupos parlamentarios ponen en duda la versión de la empresa
Piden que CAF se replantee el cierre de Trenasa y que devuelva los siete millones de euros que invirtió SODENA en la empresa o que traiga a Castejón la producción de autobuses híbridos que trasladó hace unos meses a Polonia

PARLAMENTO DE NAVARRA - Archivo (EUROPA PRESS)

Pamplona
Los grupos del Parlamento navarro han reaccionado a la información publicada este jueves por la SER, en la que se avanza que Trenasa ha recibido un contrato de RENFE por valor de 258.000.000 de euros para fabricar 37 trenes.
Desde la oposición, Carlos Pérez-Nievas (Navarra Suma) ha expresado que este movimiento de la empresa es una forma de "chantaje" porque "está utilizando como una herramienta de presión la planta de Castejón y a los 110 trabajadores que hay en Navarra para presionar al Gobierno central, para exigirle más carga de trabajo, para exigirle que le tengan en cuenta en adjudicaciones que están licitando ahora mismo".
El parlamentario por EH Bildu, Adolfo Araiz, ha manifestado que si Trenasa recibe esos contratos finalmente, debería replantearse su situación: "No sirve decir que no hay carga de trabajo y que hay que cerrar ya, tendría que replantearse ese reparto" entre las sedes que tiene la empresa.
Del mismo modo, Marisa de Simón, I-E, ha incidido en que "no existen razones objetivas" que justifiquen el cierre de la planta y ha hecho un llamamiento a aprovechar la capacidad de producción y el capital humano de Trenasa.
La parlamentaria del PSN, Ainhoa Unzu -principal socio de Gobierno- ha insistido en que la empresa ha tomado la decisión de cerrar la planta "de forma unilateral" y no comparte que exista realmente esa falta de trabajo.
Desde Geroa Bai -también en el Gobierno- María Solana ha apostado porque el Gobierno central tenga en cuenta la situación de la planta de Castejón a la hora de adjudicar los contratos de la empresa pública RENFE para garantizar el empleo.
Sodena
El grupo CAF -a través de la empresa Vectia Mobility- recibió hace dos años alrededor de siete millones de euros de la empresa pública Sodena para fabricar autobuses híbridos en Trenasa.
En 2019, Vectia se fusionó con la empresa Solaris Bus y se llevaron la producción a Polonia. El Gobierno foral optó por formar parte del accionariado, pero no ha recuperado la inversión, destinada a crear empleo y a proporcionar carga de trabajo a la planta de Castejón. Desde la propia planta han confirmado que tan solo quedan seis personas trabajando en el servicio post-venta de Vectia, sin que se hayan fabricado más autobuses.
La práctica unanimidad de los grupos parlamentarios ha manifestado su rechazo a esta situación. Exigen que la empresa devuelva los siete millones de euros o que traiga de vuelta a Trenasa una de las líneas de producción de dichos autobuses híbridos, con lo que podría mantenerse parte de la carga de trabajo.
Además, Araiz -EH Bildu- ha manifestado que el departamento de Desarrollo Económico y Empresarial -liderado por Manu Ayerdi- debería mantener una postura más activa en esta cuestión y tratar de convencer a la empresa para que no cierre.
Por su parte, María Solana, Geroa Bai, ha pedido que se separen ambas cuestiones: "Ahora lo que están en juego no son los puestos de trabajo de los autobuses, sino de Trenasa". Es necesario que todos remen en la misma dirección, ha apuntado.

Amaia Otazu
Graduada en Periodismo + International Media Programa en la Universidad de Navarra, cursó un máster...




