Los botellones caseros provocan cerca de 1.200 sanciones en tres meses

Madrid

Ahora que la hostelería baja la persiana más temprano, florecen las alternativas ilegales para continuar la fiesta. La Policía Municipal de Madrid desalojaba durante la madrugada de este domingo una vivienda de la calle de los Coloreros, en el centro de la capital, donde 80 personas participaban en una celebración en la que además se cobraba la entrada.

Esta era la intervención más destacada del centenar que los agentes han efectuado durante el fin de semana en fiestas privadas con concentraciones de personas superiores a las permitidas por las medidas del nuevo estado de alarma. El incumplimiento de cualquiera de esas restricciones puede acarrear multas de entre 600 y 600.000 euros. La cuantía de la sanción dependerá de la gravedad del hecho cometido y de la reincidencia.

1.200 sanciones por superar el límite de las reuniones sociales

Fiestas o directamente botellones se siguen repitiendo estas semanas en viviendas privadas: "he estado en reuniones de más de seis personas esta semana", reconoce un joven que considera complicado decidir cómo se excluye a alguien de un grupo para cumplir con la norma; "ayer celebramos mi cumpleaños, con la tontería vino más gente y éramos diez", confiesa otra estudiante, que atribuye la responsabilidad a la imprevisión, al igual que otro trabajador: "entre nuestro grupo de amigos y los compañeros de piso terminamos por juntarnos once".

"De repente sois siete y cómo decides quien se tiene que ir, es un poco complicado..."

Una actitud que no ayuda a contener el virus y lastra la efectividad de las medidas que restringen el horario de la hostelería. Desde que entró en vigor el límite de las reuniones sociales a finales de julio se han impuesto casi 1.200 sanciones por agrupaciones de más de diez personas, lo que se permitía entonces, o de seis ahora.

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Y otra cosa que tampoco cambia: aquellos que ni siquiera se esconden en casa: la Policía Municipal cifra en 11.400 las sanciones por consumir alcohol en la vía pública desde la orden de sanidad publicada a finales de julio.

200 establecimientos sancionados desde julio por incumplir el horario permitido

Algunas tiendas de alimentación son la única resistencia al cierre general del comercio y la hostelería madrileños a partir de las 11 de la noche. Durante las noches del viernes y el sábado comprobamos en el barrio de La Latina como grupos de amigos, en ocasiones superiores a esas seis personas permitidas, acuden fuera del horario establecido a comprar alcohol.