63 años después de la riada

Valencia

Tal día como hoy hace 63 años buena parte de la ciudad amanecía inundada. El Turia se había vuelto a desbordar a su paso por València. Las autoridades del momento convencieron a Franco para que desviara el río. Se barajó hacerlo por el norte aprovechando el Carraixet, pero al final optó por el sur, por la opción más costosa y también la más agresiva. Desaparecieron hectáreas de huertos, de sendas y de caminos, generando para siempre una barrera entre la capital y los pueblos del sur, pero también un nuevo cinturón de comunicaciones. No solo eso, los vecinos de València ganaron en tranquilidad y una nueva zona de esparcimiento, el viejo cauce, aunque para que fuese verde la ciudadanía tuvo que presionar.

Sin duda, la tragedia de la riada marcó un antes y un después, supuso pérdidas materiales y humanas, sí, pero también generó oportunidades. Quizá debamos hacer la misma lectura con la pandemia.