Niños Mutantes aporta aire fresco musical en plena pandemia al abrir sus 'ventanas'
El nuevo álbum aleja a los Mutantes de ser más Niños al explorar territorios hasta ahora desconocidos para la banda granadina
undefinedDaniel Martín
Granada
Sin duda estamos ante el disco más complejo con el que se ha atrevido esta veterana banda y es que en él han trabajado nada menos que con cinco productores diferentes, consiguiendo así romper con su paisaje sonoro, adentrándose en otro tipo de estilos y arreglos musicales. Haciendo un símil es como si hubieran dejado ser algo menos mutantes para ser más niños y hacer como estos, jugar y experimentar para crearse su propio universo.
Este disco es el triunfo del trabajo, de los tiempos medidos, de saber cuál es el camino que se quiere, incluso con confinamiento total por medio y seguir con determinación la hoja de ruta. Unas ventanas que nos servían de evasión en aquellos duros días y que nos dejaban sobrevolar ese nuevo local de ensayo que son estos 10 temas. Eso sí, debido a la complejidad del disco, si ya es recomendable seguir el orden que nos proponen los grupos, en este caso es casi obligatorio hacerlo para no perder en ningún momento el hilo conductor.
Debido a los motivos por todos conocidos esta presentación estaba prevista en plena primavera, ¡qué mejor que abrir las ventanas a la explosión de color de esa estación!, sin embargo se ha producido en pleno otoño, pero con la sensación que el disco también brilla cuando la luz deja paso a la oscuridad, es la genialidad de este álbum, la maleabilidad subyacente que tiene, permite su escucha de forma ininterrumpida en casi cada una de sus escuchas sin importar lo que ocurre fuera.
Con el aforo prácticamente vendido, tan sólo quedaron algunas butacas vacías el viernes, el Teatro CajaGranada acogió a los seguidores de los Mutantes en un entorno seguro y controlado en plena pandemia. Por ver la parte buena a estos nuevos formatos, uno se puede concentrar más en la música y olvidarse de empujones o comentarios de los vecinos, aunque bueno, eso también es parte intrínseca de los conciertos. Un recinto con una acústica fuera de toda duda y que ayudó a realzar la presentación del disco.
Con apenas unos minutos sobre las 22.00h y tras la presentación por parte de Ángel Carmona, compañero de Radio3, aparecían Niños Mutantes sobre un sobrio escenario negro tan solo iluminado con los diferentes signos que se les han asignado a cada uno de los diferentes productores, unas figuras geométricas que se mimetizan con cada uno de los temas y que nos plantean una especie de juego a los jeroglíficos.
“Camino perdido” fue la primera en sonar, un tema que hace referencia a un hombre dormido que no quiere despertar, que suena en su primer tercio como un clamor de auxilio, para virar hacia un grito desesperado sobre alguien que defiende lo único que tiene, su libertad.
Como grupo de expertos que son sobre las tablas, la tónica del concierto fue presentar el disco al completo reforzado por sus hasta ahora grandes éxitos y que sirve para suplir la falta de baile, apuntalando esa sensación de confrontar su sonido frente al nuevo, un buen ejemplo es "Una noche", un tema que sí emplea sus guitarras a fondo, tanto que parece sacado de una cara B de los trabajos más importantes de The Smashing Pumpkins, un himno in crescendo continuo desde lo más oscuro del principio al final más luminoso posible y que enlaza de forma magistral con Náufragosy así yuxtapone ambos mundos, el pasado y el hoy.
Por fin podíamos ver como el undécimo trabajo de estos ilustres vecinos, "Ventanas" funcionaba a pleno rendimiento sobre el escenario y como se articulan las diferentes producciones que han ido perfilando cada uno de los temas, Ángel Luján y Raúl Pérez, Chistina Rosenvinge, Carlangas y Anxo de Novedades Carminha junto a Noni y Doria de Lori Meyers. Una alineación espectacular para darle ese toque y arista a cada uno de los temas.
"Más música y menos Lexatín" dijo Juan Alberto, demostrando una vez más que la cultura es segura. Un concierto que nos dejó alguna de las frases lapidarias a las que nos tiene acostumbradas su cantante, como el "momento homenaje" a Miguel Bosé y Díaz Ayuso y su "Te favorece tanto estar callada".
Estas Ventanas nos traen un buceo en el interior de los esqueletos de los temas, para así alejarse del artificio y buscar la cadencia básica en su origen. Aunque en su presentación en directo nos sorprendieron al demostrarnos como el alma de estos 10 cortes sigue palpitando, al igual que un ser vivo que no se conforma con seguir en su estado primigenio, si no que sigue respirando y modificando su estructura, incorporando nuevos arreglos y matices.
Un concierto cercano a las 2 horas que nos trajo un soplo del "Oxígeno" más puro de Sierra Nevada y trasladarnos al Veleta para así alejarnos de todo lo que nos sucede a los humanos por volar ras de tierra y desde allí mirar hacia arriba para dejarnos llevar hacia la órbita terrestre aunque eso signifique que nos equivoquemos una y otra vez.