Subdelegación endurece los requisitos para que los vecinos de la comarca realicen sus compras en Aranda

Aranda de Duero

"Comprar no será un motivo para poder entrar en la ciudad confinada (Burgos o Aranda)". Esta es la taxativa afirmación que hacen fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Burgos, de quien dependen los efectivos de Policía Nacional y Guardia Civil en la provincia. Así lo han manifestado en la reunión que mantenía este martes el CECOPI, el órgano de coordinación entre diversas administraciones y las fuerzas de seguridad para el control de las medidas contra la pandemia. Según estas mismas fuentes tendrá que demostrarse que la compra que se pretende realizar es imprescindible. "Aquellos que acudan a Burgos o Aranda alegando motivos de compra tendrán que justificar que es una necesidad perentoria que no se puede suplir en los comercios cercanos o mediante un servicio de telecompra" afirman.

Este rigor en la aplicación de la orden de la Consejería de Sanidad contrasta con las declaraciones del delegado territorial de la Junta en Burgos, tanto en medios como Radio Aranda como en el propio CECOPI, donde Roberto Sáiz reiteró que el abastecimiento de bienes y servicios básicos sí está incluido entre los motivos para poder entrar y salir de los municipios confinados.

También la alcaldesa de Aranda, Raquel González, se ha adherido a este criterio en la mencionada reunión, recordando el auto judicial aclaratorio del confinamiento de Aranda en el mes de agosto, donde el magistrado asimilaba la situación con la del Estado de Alarma, cuando los vecinos de la comarca no encontraron impedimentos para realizar sus compras básicas en la capital ribereña.

Queda por aclarar cómo pueden justificar los ciudadanos sus necesidades perentorias imposibles de suplir de otra forma que comprando en Aranda.