Sufrimiento extremo para romper la racha negativa
Un gol de Ocampos de penalti -falló el primer lanzamiento que pudo repetir- le dio la victoria al equipo de Lopetegui, que no pudo cerrar el partido y tuvo un sobresalto en tiempo de prolongación.

Navas se tuvo que retirar del partido por lesión. / AFP7 vía Europa Press (AFP7 vía Europa Press)

El Sevilla sufre demasiado para conseguir la victoria. Vive cerca del precipicio durante los partidos y, por ello, se ha encontrado en tres ocasiones con la derrota. Frente a Osasuna salió cara, pero pudo haber sucedido cualquier cosa. De todas formas, con el calendario tan apretado, la Champions y la mala racha precedente, el triunfo sabe a gloria antes del parón.
La versión del Sevilla es muy diferente a la imagen que ha ofrecido en los tres partidos de Champions. En la máxima competición europea es un equipo con hechuras importantes; en Liga, ofrece una imagen alejada de lo que necesita un conjunto que apuesta por estar entre los mejores.
Partió en el encuentro con dos delanteros. Oportunidad para Carlos Fernández junto a En-Nesyri, Oliver Torres por Rakitic y el carril zurdo para Acuña. Surgieron complicaciones. Navas jugó tocado, sustituido al descanso, y, antes, Acuña tuvo que ser relevado por lesión.
Al margen, el equipo de Lopetegui no tuvo ni empaque ni fútbol. Atascado en su juego e igualado, por lo bajo, al rival. Sin ocasiones claras y sin el poderío mostrado en otros encuentros.
Con el sistema de tres centrales, con Ocampos como carrilero, mejoró. Un equipo más abierto con el imprevisible argentino a sus anchas. En una de esas acometidas sacó un absurdo penalti que convirtió a la segunda porque, en su primer lanzamiento, paró Herrera que se adelantó ilegalmente.
De ahí al final, puro sufrimiento. Trabajo a destajo de todo el equipo para evitar el empate. No es que Osasuna tuviese demasiadas opciones, pero, cada balón al área, creaba inquietud. Así sacó Diego Carlos un cabezazo de Budimir cerca de la línea de gol.
Realmente, el Sevilla hizo lo que tenía que hacer: ganar. Es una victoria que no va a disipar las dudas que ofrece el equipo en el campeonato liguero, pero muy necesaria. Después de tres derrotas consecutivas, la racha hay que romperla como sea. Y éso ocurrió. Parón para oxigenar al equipo y recuperar jugadores. Con este nivel, parece difícil que el Sevilla pueda cumplir su objetivo, pero ésto acaba de comenzar.




