Los CEAS recaban opiniones sobre las viviendas sociales
El Consistorio arandino ha abierto un plazo de sugerencias para ultimar la ordenanza, la tasa y reglamento para adjudicar estos inmuebles
Aranda de Duero
El Ayuntamiento de Aranda quiere recabar la opinión de los colectivos sociales antes de aprobar una ordenanza que regule el uso de las viviendas sociales. A través de la página web municipal el Consistorio ha abierto un plazo de consultas para recibir ideas de los sectores que más puedan aportar a este respecto. También solicita sugerencias en relación a la tasa a la que estarán sujetos estos inmuebles y el reglamento para su adjudicación. Para ello ha establecido un plazo de diez días.
Desde hace tiempo este departamento trabaja en un borrador para crear una bolsa de solicitudes para su ocupación, de tal manera que el acceso se haga en condiciones de igualdad de aquellas personas que presentan una situación económica con recursos insuficientes para acceder al mercado de la vivienda de alquiler. La tasa podría oscilar entre 70 y 250 euros.
El Ayuntamiento dispone actualmente de una decena de pisos disponibles a los que quiere dar salida para hacer frente a las necesidades que están aumentando como consecuencia de la crisis. Estas viviendas, que están ubicadas en distintas zonas, cinco de ellas en la avenida de la Estación (las antiguas viviendas de los camineros), tres en la calle Santa Ana, uno en la de Las Francesas y otro más en la calle Santiago, hasta la fecha se han utilizado en mayor medida en su vertiente de emergencia, para solventar problemas puntuales de forma inmediata, pero este reglamentación permitirá habilitar un registro permanente de solicitudes para ir adjudicando su uso en función de otras necesidades. La idea inicial es establecer un tiempo máximo de seis meses para la urgente necesidad y contratos de dos años, prorrogables por otros dos, para su uso como vivienda social. “Está llamando mucha gente interesada en las viviendas que tenemos y luego hay también colectivos que las solicitan para sus proyectos y vamos a ver si podemos agilizar el trámite y sacar un registro municipal”, detalla Cristina Valderas, la concejal responsable del área.
Para cubrir algunas carencias de equipamiento de estos inmuebles, la distribución de los remanentes cuenta con una partida de 40.000 euros para su puesta a punto y la compra de mobiliario. Actualmente está en período de licitación un concurso público con un presupuesto base de 33.000 euros más IVA para adquirir una serie de muebles y equipos de cocina, mobiliario de comedor, dormitorio, cuarto de estar y cuarto de baño para cada una de las diez viviendas sociales que tiene el Ayuntamiento. “Estuve visitando vivienda por vivienda y estuvimos haciendo una valoración de la situación la que se encontraban, porque son viviendas que en algún momento han sido ocupadas por algún caso puntual y al final tenían sus carencias en equipamiento o en arreglos de electricidad o pintura, pero con este remanente yo creo que van a quedar para poderlas ocupar”, confía Valderas.