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Mucho más que el primer triunfo

El BlasGon y CERES Villa de Aranda supera a Valladolid (33-32) con un tanto desde el extremo del capitán Víctor Megías que desata la euforía amarilla

"Es la primera en ASOBAL para muchos de estos jugadores, toca celebrarlo", afirma Alberto Súarez

El gol de Víctor Megías

El gol de Víctor Megías con el que el Villa de Aranda ha logrado su primer triunfo de la temporada en ASOBAL / Cadena SER

Aranda de Duero

Tenía que llegar y llegó. La primera victoria del Villa de Aranda. Quizás lo haga tarde. O quizás en el momento idóneo tras todas las vicisitudes que han golpeado a este equipo. Tres confinamientos, la afección directa de la Covid-19 y la reciente norma de un pabellón sin su alma, afición arandina. Quizás por todo eso, esta victoria frente a Valladolid (33-32), y por ser la primera, sea mucho más que un triunfo. "Es la primera para muchos de estos chavales, ¡toca celebrar!, aunque sea en casa con una cerveza", recalcó un entusiasmando Alberto Suárez, entrenador de los amarillos, tras el encuentro.

Dos puntos que se fraguaron en un partido de alternativas. Un derbi castellano y leonés ante Valladolid que no defraudó y que se resolvió como gusta en la capital ribereña, con suspense y en la última jugada del encuentro. Con estilo. Al estilo Villa de Aranda. Megías, el ejecutor, como ya hiciera en Alicante la pasada temporada. O como lo consiguieran los amarillos ante Nava hace dos temporadas en el Príncipe de Asturias con gol del ex canterano Guille. Glorioso una vez más. Y aunque tuvo que ser sin su mejor aliado, la afición arandina, el equipo no faltó a su cita con la esquina. Para cantar una vez más, como siempre en las victorias el himno de Aranda. El balonmano cobra otra dimensión en Aranda de Duero. Innegable.

Con todo, no fue sencillo. En absoluto. Tocó sufrir, como es habitual. ¿Qué sería de los partidos en el Príncipe sin esas taquicardias? Comenzó mandando y con solvencia en el marcador la escuadra de Suárez. Desarticuló a los de David Pisonero y se marchó en el marcador. A los nueve minutos de partido el Villa de Aranda doblaba a Recoletas (8-4) Gran arranque en ataque. Al habitual, Matheus se sumó Julen, ambos con dos dianas, allanando el camino. Y el buen tono de los ribereños se refrendaba con un Luis de Vega, excelso. Si funciona la portería, acompaña la defensa y el equipo corre, este Villa de Aranda es imparable. Y eso sucedió para marcar la máxima deferencia del partido. 13-9.

Pero, siempre hay un pero, siempre hay un rival enfrente. Un actor secundario que quiso arrebatarle el del principal al Villa de Aranda, y a sabiendas que lo consiguió para llevar el encuentro a la mínima expresión. 15-14. Desánimo. Momentáneo. Nada es fácil en esta liga. Y por delante, cinco minutos que sirvieron para mantener la práctica igualdad. Al descanso, mínima renta ribereña 17-16. Victoria moral para los pucelanos que supieron agarrarse al partido.

Bendito deporte

La segunda parte... fue como reza la expresión cinematográfica Nunca segundas partes fueron buenas. Y a fe que no le quiso quitar la razón el lamentable inicio del Villa de Aranda. Susto. El ritmo en defensa, fundamental para este equipo, no existía. Los errores en ataque, demasiados. La escuadra amarilla sufría para ver como sus rentas de dos goles se tornaron drásticamente. Así se pasó del 20-18 y el 22-20 al 24-27 a los 13 minutos de la reanudación.

Saltaban las alarmas. Asaltaban las dudas. Pero sin en la primera parte fueron los pucelanos quienes se agarraron al partido, ahora le llegaba el turno a los amarillos. Matheus a rescate desde los siete metros. El brasileño es fundamental en este equipo. Lesión de Nico López. El central madrileño se lastimó el tobillo en un contrataque. Ya no participaría más. Otro problema. Nunca es fácil. Nunca lo será, es el destino glorioso de este equipo.

Media parte por delante para un equipo que como avisó Suárez "están entrenando mejor que nunca" y lo desmostró en el Palau (15-14, en la segunda parte) Y esa mejoría llegó a pesar de las dificultades, al menos para meterse en el partido, para creer en un triunfo anhelado, por tanto de lo pasado.

Diez minutos de sufrimiento hasta llegar al momento de gloria. Se redujeron las distancias. A la mínima expresión, con el 28-29. Diez minutos por delante. Atrás cincuenta describían el cansancio entre los protagonistas. Valladolid, a pesar de sus dolencias y ausencias -Víctor Rodríguez y Diego Camino- por la Covid-19 aguantó el envite. Momentos de incertidumbre y de taquicardias. 30-31. Esperanza. 30-32. Desesperación. Pero... 31-32 y empate... El partido donde lo quería el cazador, Megías. La presa acorralada, en el peor escenario posible, el Príncipe de Asturias. Y la resolución clara como el instinto ganador de ese ADN que reza en el espíritu del Villa de Aranda, Hasta el final. Así fue, es y será. En este caso claudicó Valladolid, no sin suspense en la acción final.

Una jugada para la gloria

Ataque ribereño. Lanzamiento. Parada de César Montes. Balón para Valladolid. 15 segundos. Precipitación. Lanzamiento desde su área de los pucelanos. Balón para el Villa de Aranda. 10 segundos. Balón de extremo a extremo. Bola caliente para Megías. Tenía que ser el capitán, para hacer justicia por todo lo pasado... y... Gol. 33-32. Final. Gloria. Júbilo. Carreras sin sentido por toda la pista del Príncipe de Asturias para abrazarse. Una piña de jugadores y cuerpo técnico que cerraba el primero de muchos éxitos a los que está destinado el Villa de Aranda en casa. Porque una vez más, y aunque esta vez sin el corazón de la afición, los pulmones y el coraje de este grupo de deportistas vivió a dejar algo muy claro que en el Príncipe de Asturias, el balonmano es otro deporte, en muchas ocasiones, glorioso.

Ahora, toca celebrar antes de regresar al trabajo. La próxima jornada exigirá nuevamente a los ribereños en su visita a Irún para medirse al Bidasoa de un viejo conocido, Jacobo Cuétara. Los irundarras están avisados. Los ribereños llegan en su mejor momento de la temporada y ya saben lo que es derrotar a uno de los equipos de la parte alta, Valladolid. ¿Conquistará Artaleku un renacido Villa de Aranda? La resolución el próximo domingo a las 12:00 horas.

 
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