¿Nuevos retos para la Universidad de Castilla-La Mancha?

Albacete

El próximo 3 de diciembre tendrán lugar las elecciones a Rector en la Universidad de Castilla-La Mancha.

Finalmente serán dos los candidatos los que participarán en el proceso: el actual rector, Miguel Ángel Collado, y Julián Garde, que ha sido vicerrector de investigación hasta que en el pasado mes de mazo presentó su dimisión.

Es un proceso especialmente importante no solo para la propia Universidad, sino para toda la sociedad castellano manchega en su conjunto. Estamos hablando de una organización con más de 4.000 trabajadores y un presupuesto muy superior al de cualquier Ayuntamiento de nuestra región.

A la Universidad se le debe requerir una fuerte implicación con la sociedad en la que está inmersa y una transferencia y divulgación del conocimiento hacia la misma, puesto que eso es lo que justifica su razón de ser.

En este sentido, los retos de la Universidad de Castilla-La Mancha, más allá de resolver los problemas internos de gestión, los podemos sintetizar en dos:

1. En primer lugar, hay que recuperar las cifras de retención de los estudiantes que hacen la prueba de acceso a la Universidad en nuestra región, evitando que se vayan a otras universidades. Si no se hace seguiremos asumiendo una tremenda pérdida de capital intelectual para nuestra región, que en muchos casos es irreversible. Por lo tanto, quién gane las elecciones a Rector debería fijar como objetivo prioritario que los estudiantes castellanomanchegos nos elijan como primera opción para formarse.

2. En segundo lugar, hay que recuperar la presencia de la Universidad en la sociedad. Esta presencia se articula entorno a tres grandes retos:

• Que las empresas contemplen la oferta investigadora de la Universidad como una opción primordial en materia de investigación, desarrollo e innovación.
• Que la Universidad vuelva a ser un agente clave en los foros encargados de definir e implementar estrategias de desarrollo económico y social.
• Que la Universidad sea referente cultural y se convierta en complemento del resto de ofertas presentes en la Región.

Por lo tanto, esperemos que cualquiera de los candidatos tenga suerte y cuando sea elegido como Rector sea capaz de implantar un proyecto de Universidad que apueste por el desarrollo socioeconómico, artístico, deportivo, científico y tecnológico de nuestra Comunidad Autónoma.