Son imprescindibles

Palencia

A pesar de que vivimos en un estado de derecho, que con distintas interpretaciones lo dicen cada día y lo repiten en las diferentes charlatanerías los políticos, según su signo y según sus intereses, el estado de derecho debe garantizar cubrir las necesidades básicas de las personas. Pues bien, vemos desde hace años la cantidad de necesidades de las personas que son atendidas por las llamadas ONG’S, es decir organizaciones no gubernamentales. Organizaciones creadas por la ciudadanía que aplican la solidaridad, la ayuda mutua y la denuncia, defendiendo lo que es justo.

Gran parte de estas ONG padecen la política municipal de anular su participación, ningunear sus propuestas y opiniones que son necesarias y estrangular su funcionamiento económico. Sabemos de sobra la labor que hacen asociaciones de autismo, síndrome Down, esclerosis, de discapacidad, quienes trabajan con inmigrantes, con mayores etc.. Todas las que desde la participación voluntaria, la dedicación de tiempo y de esfuerzo, son capaces de mejorar la vida de la gente.

Se han publicado recientemente las bases de la convocatoria de ayudas desde el área de servicios sociales del Ayuntamiento, dirigido a prevención y protección de la salud, rehabilitación, integración social, personas mayores y muchos más, con una dotación del presupuesto del año 2020 de 145.000 € y el plazo de presentación de solicitudes que finaliza el 30 de noviembre.

Lo llamativo de esta convocatoria es que indica que las actividades deben realizarse y ejecutarse en el año 2020. Lo he leído varias veces para comprobar que no es un error, pero me parece una tomadura de pelo sacar la convocatoria en noviembre y pedir que las actividades se realicen en este año.

Estoy por pensar que esto tiene una intencionalidad política de acabar con estas asociaciones tan necesarias, como ya les exigió la concejala de Vox al equipo de gobierno de PP con Ciudadanos, o al revés que me confundo en el orden.

Yo considero que las Asociaciones, las ONG son imprescindibles y quienes desde la responsabilidad política no quieran verlo o estén haciendo lo posible para su desaparición, deben saber que están en contra de los principios democráticos y más pronto que tarde pagaran por ello, por no facilitar los cauces de participación y los recursos económicos necesarios.