Quince años y medio de prisión para el entrenador de Betxí que abusó sexualmente de gimnastas menores de edad
Betxí
La Audiencia de Castellón ha condenado a quince años y medio de prisión al entrenador y conserje del polideportivo de Betxí, por abusos sexuales sobre tres gimnastas menores de edad. Los tribunales le han absuelto de otros dos delitos por los mismos hechos, al considerar que ya han prescrito.
La Audiencia celebró durante la segunda semana de este mes de noviembre el juicio contra un entrenador y conserje del polideportivo de Betxí, para quien las acusaciones pedían 28 años de prisión por abusos sexuales sobre cinco gimnastas con edades comprendidas entre los 6 y los 14 años en el momento de los hechos, cometidos, según la acusación particular, entre 1992 y 2017.
La sentencia condenatoria, le absuelve de dos de los cinco delitos de abusos de los que estaba acusado, al considerar que han prescrito, pero le condena a quince años y medio de prisión por el resto de acusaciones. Además le impone el pago de 16.000 euros en indemnizaciones a las víctimas, un pago del que serán responsables civiles subsidiarios el Club Gimnástic de Betxí y el ayuntamiento de este municipio.
Por otra parte, el juzgado le impone diez años de inhabilitación especial para el ejercicio de cualquier profesión u oficio que conlleve actividades deportivas relacionadas con menores de edad, y la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros de las víctimas por otros diez años contados a partir del cumplimiento de la pena privativa de libertad. Junto a ello, le impone otros cinco años de libertad vigilada a partir del momento en que salga en libertad, y el abono de una buena parte de las costas procesales.
El fallo considera probado que el reo dirigía los entrenamientos de las gimnastas menores de edad de forma dura y exigente, llevando a las menores al límite, bien haciendo uso de insultos o menosprecios para dirigirse a ellas, llegando a llamarlas subnormales, niñatas de mierda o inútiles, bien castigándolas con repetición de ejercicios físicos severos e incluso castigos de grupo, bien tirando objetos al suelo o pegando puñetazos contra la pared.